Es importante entender que cada uno de nosotros podemos ser desfibriladores. Podemos evitar un suicidio, una depresión, la tristeza profunda de un niño o una niña… Podemos evitar cantidad de problemas que, si se enconan y no se expresan porque no hay un adulto receptor, comprensivo y empático, pueden enquistarse y acabar transformándose en un futuro problema mental.
Educar y ser desfibrilador es un acto de altruismo. Sin saberlo, podemos evitar muchos problemas en nuestro alumnado y sus familias. Un consejo, una escucha, una mirada atenta, a tiempo dedicado a una persona… a veces salva su vida o le evita un problema mayor.
Editorial: El Hilo Ediciones
ISBN: 9788412834413
Publicado:3/2024
Páginas: 76
Idioma: Español
Encuadernación: Rústica