Para mí la danza es un lenguaje muy parecido a las palabras. Pero a diferencia de las palabras, la danza representa una forma de comunicación y lenguaje mucho más directa del yo. En un contexto educativo caracterizado de una extrema presión que hace perder el contacto con el yo interior emocional y físico, la DMT puede ofrecer la capacidad de hacer frente a este mundo.
Integrar la DMT en la escuela ordinaria.
Me he encontrado con adolescentes sin ilusión y sin proyectos. Niños apagados, tristes y aburridos. Me he encontrado también con jóvenes con sueños y con mucha ilusión para conseguirlos. La capacidad de motivarse y tener intereses está conectada a la capacidad de tener una orientación en el mundo.
Motivación tiene la misma raíz etimológica de emoción, la primera depende de la secunda moviendo a la acción, juntas activan las risorsas de un individuo hacia un objetivo. Para motivarse es entonces necesario conocer las raíces profundas de las emociones que son las que deciden nuestra manera de ser.
En el mundo de los “más pequeños” y de los “jóvenes” las emociones están entre el entusiasmo y la tristeza, entre el ego y la incertidumbre. Ese columpio hace que se corra el riesgo de no poder descubrir el proprio camino. Lo que más complica la no-motivación es la crisis de la búsqueda de la identidad, una identidad que esta’ en continuo ataque por las imágenes de los medios sociales. Sobre todo en frente a las imágenes del cuerpo. Un cuerpo que no se manifiesta en su naturalidad. Los jóvenes solo miran la superficie de su cuerpo en frente al espejo y se sienten casi siempre gordos aun esa percepción no es real y en cada caso se vee feos. La DMT puede jugar un papel muy importante en los individuos que experimentan severas críticas y rechazo de ciertas partes del cuerpo
Hay muchos caso de trastornos alimentarios, juegos peligrosos y violentos que los hacen “estar/sentir vivos”, o simplemente hay quien vive de manera pasiva.
La DMT puede contribuir a la realización en diferentes dimensiones de la educación de la persona.
Moviendo las emociones permite reconocerlas y nombrarlas tomando consciencia de lo que sentimos. Dentro de la sesión de DMT la verbalización permite de describir con las palabras lo que se siente para dar voz a las emociones y saber reconocerlas y distinguirlas tanto a nivel verbal como en movimiento.
El proceso de integración llega a acoger la propia imagen no solo como una apariencia, no solo como una superficie en el espejo sino como volumen en movimiento pasando por emociones, sensaciones y pensamientos que pueden manifestarse y expresarse con una danza autentica.
Para mí la danza es un lenguaje muy parecido a las palabras. Pero a diferencia de las palabras, la danza representa una forma de comunicación y lenguaje mucho más directa del yo. En un contexto educativo caracterizado de una extrema presión que hace perder el contacto con el yo interior emocional y físico, la DMT puede ofrecer la capacidad de hacer frente a este mundo.
La danza es una herramienta natural del hombre para reunir mente y cuerpo y la DMT es especialmente adecuada para educar a sus expresivamente naturales ritmos del cuerpo, haciéndolos menos vulnerables a la presión externa.
Existen muchos fuentes sobre la DMT en la educación, como por ejemplo Karkou (2010), Curtis (2002 & 2006), Karkou & Jones (2003), Panhofer (2005), Rakusin (1990) etc.
La Danza Movimiento Terapia, se basa principalmente en la conexión entre movimiento y emoción (moción y emoción) y recurre a uno de los medios de expresión terapéuticos y artísticos más antiguos del hombre: la danza.
Dentro de un contexto educativo la DMT se convierte en un recurso facilitador del conocimiento del cuerpo, del espacio y del entorno, promoviendo nuevos modos de expresión y de relación. El Danza Movimiento Terapeuta facilita el uso psicoterapéutico del movimiento y la danza, a través del cual una persona puede participar creativamente con un proceso para favorecer su integración emocional, cognitiva, física y social. No se requiere experiencia en el baile anterior, solamente mover el cuerpo en nuevas formas de ser.
Elena Schisano
Agradecimientos
A Heidrun Phanofer por ofrecerme sus conocimientos y ayudarme a entender los objetivos y esencia de esta exploración.
Referencias
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In A. Bannister & A. Huntington (Eds), Communicating with Children and Adolescents: Action for Change. London: Jessica Kingsley.
Curtis, S. (2006). Group movement psychotherapy with children in a mainstream school. In V. Karkou & P. Sanderson (Eds), Arts therapies – A Research based Map of the Field. London: Elsevier Churchill Livingston.
Fischman, D. (2005). “Danza Movimiento Terapia: encarnar, enraizar y empalizar.
Construyendo los mundos en los que vivimos.” Comunicación presentada en el I Congreso de Artes del Movimiento IUNA (Instituto Universitario Nacional De Artes ):Buenos Aires.
Karkou, V. (2010) (Comp). Arts Therapies in Schools: Research and Practice. London: Jessica Kingsely Publisher.
Karkou, Vicky and Jones, P (2003) The Beginnings of the Labyrinth Project in Secondary Schools. In: Proceedings of the 3rd International Theatre and Drama Education Conference: Building Bridges. Athens, Greece. (in English and Greek). Metaixmio, Athens.
Levy, F. (1995). Dance and other Expressive Art Therapies. When words are not enough. London : Routledge.
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Panhofer, H. (2005). “Come back, come back!” Apregos rotos y sus implicaciones clínicas en Danza Movimiento Terapia. En H Panhofer (Ed.). El cuerpo en psicoterapia. Teoría y práctica de la Danza Movimiento Terapia. Barcelona: Gedisa.
Panhofer, H. (2005). Cuando las palabras no son suficientes. La Danza Movimiento Terapia (DMT) con niños con trastornos emocionales y de comportamiento. En: II Congreso Internacional Sobre Trastornos del Comportamiento en Niños y Adolescentes. Fundación Belén, MAPFRE Medicina.
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Ritter, Meredith & Kathryn Low. 1996. Effects of dance/movement therapy: A meta-analysis. The Arts in Psychotherapy 23, 249-60
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Danza Movimiento Terapia. Barcelona: Gedisa.