Para la evaluación auditiva en neonatos y preescolares, se recomienda el uso de métodos objetivos, con alta sensibilidad y especificidad. Los más utilizados son las emisiones otoacústicas y los potenciales evocados
Chiang y Smurzynski demostraron que las emisiones otoacústicas pueden ser registradas en neonatos de pretérmino. Compararon las emisiones otoacústicas con los potenciales evocados auditivos de tallo cerebral en lactantes menores de tres meses y registraron que, cuando el umbral de la onda V era menor a 30db HL, las emisiones otoacústicas estaban presentes, pero no lo estaban cuando el umbral de la onda V era mayor a 40db HL.
Se ha observado una excelente relación entre el umbral tonal y las emisiones otoacústicas en sujetos con audición normal y con pérdidas auditivas. El mayor número de sujetos examinados fue de 10,000 recién nacidos en el estado de Rhode Island de los Estados Unidos.
Por los resultados obtenidos, estos muestreos sirvieron de base para demostrar que las emisiones otoacústicas son de considerable utilidad en la identificación temprana de los problemas auditivos de manera universal. Para disminuir los posibles artefactos, se sugiere que el estudio se realice en sueño fisiológico.
Método
Para la evaluación auditiva en neonatos y preescolares, se recomienda el uso de métodos objetivos, con alta sensibilidad y especificidad.
Los más utilizados son las emisiones otoacústicas y los potenciales evocados. Por lo tanto, se insiste en que no se realicen solamente audiometrías tonales.
Las emisiones otoacústicas son energía acústica generada por la cóclea en forma espontánea o en respuesta ante un estímulo (provocadas), y son detectadas en el conducto auditivo externo por un micrófono.
La función de las emisiones es el estudio de la presencia o no de patología en la cóclea, específicamente, células ciliadas. Las emisiones, clínicamente más utilizadas en los programas de detección precoz de pérdidas auditivas, son las transientes, estímulo click de 80 a 85 dB, en un espectro de frecuencia entre los 500 y 4000 Hz.
Algunos especialistas sugieren que la presencia de transientes sugiere sensibilidad auditiva de 30dB HL más o menos ,y los productos de distorsión consisten en serie de pares de tonos puros, donde la frecuencia más baja se denomina F1, mientras que la más alta es F2; cuando estos llegan a la cóclea, estimulan a un grupo de las células ciliadas externas y se produce un tercer tono conocido como producto de distorsión.