La salud de los docentes es importante no sólo por su rol profesional sino porque se entiende que la salud ocupacional es parte de un circuito espiralado y recurrente en el que no puede cuidar a otros si no sabe cuidar de sí mismo, y este cuidar de sí mismo es un aprendizaje que, inevitablemente, incluye el bienestar de los demás.
e) Problemas posturales:
- Maestros de Educación Inicial
En este nivel educacional los niños son altamente demandantes y procuran para sí la atención constante del docente. La mayor parte del tiempo este permanece de pie generando ciáticas y lumbagos a través de posturas incorrectas. El dolor de espalda es una constante en los docentes de niños pequeños.
- Maestros de Nivel Primario:
Hay una sintomatología característica del docente de grado: los dolores de cuello y espalda.
Los maestros de Escuelas Primarias permanecen largas horas sentados mientras sus alumnos trabajan o corrigiendo trabajos. Cuando están sentados en su escritorio la asimetría de los hombros de la postura que adoptan produce tensiones en la espalda y cuello. Por otra parte si la columna se arquea, inclina o torsiona en forma repetitiva da lugar a la aparición de escoleosis estructurales o permanentes. La función discal de distribuir y amortiguar las presiones que sufre la columna se pierde y deriva en procesos inflamatorios o degenerativos que afectan a las regiones cervical, dorsal y lumbar.
Otro aspecto problemático que repite lo anterior es la constante inclinación hacia los pupitres de los alumnos que suelen estar ubicados a la altura de su cintura produciendo contracturas musculares crónicas, discopatías, etc.
La forma de revertir estas dolencias es, en caso de permanecer sentado, impartir igual descarga en las nalgas, y parado evitar utilizar siempre el mismo lado o costado para llegar a los alumnos de manera que la columna vertebral trabaje en forma alternada y simétrica.
- Docentes de Nivel Secundario:
Aunque debido a la edad de sus alumnos este docente ya no está tan exigido físicamente padece molestias características debido al prolongado tiempo que permanece sentado ya sea durante las horas de clase o corrigiendo trabajos o avaluaciones. Adolece de todas las actitudes cifosantes típicas de las tareas que se realizan en esta posición que producen una acentuación de las curvaturas normales de la columna por lo cual las presiones normales que absorbe y transmite cada disco invertebral se hacen descentradas lo que da lugar a la evolución del proceso degenerativo.
Otra actitud característica es la permanencia de pie frente a los alumnos.
Desde el punto de vista mecánico el equilibrio general del cuerpo se organiza a partir de la articulación de la cadera. En una postura normal la línea de gravedad cae dentro de la base de sustentación. A medida que se desciende por la columna vertebral cada unidad funcional sostiene un peso mayor y posee un valor intrínseco de equilibrio, en términos de la carga que soporta y de sus propias características de deformación. Sin embrago cuando el docente está parado suele descansar el peso de su propio cuerpo sobre un mismo lado y de esa forma pensiona los mismos grupos musculares que afectan a la zona lumbar, cadera, rodillas, etc.
Una manera de prevenir estas dolencias es la de desplazarse a los largo del salón de clase o, en los casos en que el docente debe permanecer inmóvil frente al pizarrón, alternar el peso corporal sobre uno o ambos pies sin sobreestimar las rodillas.
5.- Conclusiones:
La salud de los docentes es importante no sólo por su rol profesional sino porque se entiende que la salud ocupacional es parte de un circuito espiralado y recurrente en el que no puede cuidar a otros si no sabe cuidar de sí mismo, y este cuidar de sí mismo es un aprendizaje que, inevitablemente, incluye el bienestar de los demás.
Si bien el alumno es el eje y centro de la tarea educativa, el docente no es un factor o un instrumento para llegar a un objetivo pedagógico. Como ser humano deberá ser atendido en su persona y sostenido en su posibilidad de aprender como lo merece su alumno.
“Los maestros han sido tratados con sentimiento, ensalzados, defendidos, compadecidos, censurados y condenados. Son generalmente mal pagos. Están sometidos a reglamentaciones que ningún otro ser humano aceptaría. Tiene que satisfacer a los consejos escolares, a los inspectores y a los directores. Tienen que cuidar meticulosamente la ropa, la dicción y los modales. Tienen que parecer siempre dignos y no mostrarse jamás disconformes ni criticar a sus superiores. Tienen que reflejar las opiniones políticas aprobadas de los buenos elementos de la sociedad… Pero esos buenos maestros son buenos maestros no por el sistema profesional por el que actúan sino a pesar de él…”
Leo Kanner
Psiquiatría infantil. 1935
Hoy, a más de setenta años de estas afirmaciones rescatamos la vigencia de lo escrito por este notorio psiquiatra infantil. Así podremos darnos cuenta de la exigencia de salud física y mental que se da por supuesta en la persona a la que denominamos docente, pedagogo o maestro.
Permanentemente dentro de las exigencias mencionadas a las que son sometidos los docentes se halla la de ser transmisor ante sus alumnos y sus grupos familiares de los conceptos de salud y prevención, pero ¿es esto posible desde una persona descuidada por el medio laboral que le exige pero no lo cuida, no lo protege?
Creemos que solo un docente sano puede cumplir con este aspecto de su misión educadora. Si hasta ahora no existe ninguna acción preventiva o curativa de parte del sistema laboral en el que se halla inmerso es posible que concientizando a las personas se logren, por lo menos, conductas que lleven a la autoprotección y así se logre desterrar de las escuelas muchas patologías que afectan el normal desarrollo del proceso de enseñanza-aprendizaje.
Un docente sano es seguridad de continuidad en la formación de los niños y adolescentes que tiene a su cargo. Es certeza de que cumplirá con su trabajo diario de forma más amable, más feliz, mostrando a sus alumnos así que desarrollar una vocación es una bendición de la vida y no una carga pesada casi imposible de sobrellevar. Esto también es enseñar.