Muchas veces les decimos cosas como “Haz esto”, “Tienes que hacer aquello”, o “Deja de hacer eso”. Pero, lo que construye una relación de calidad con ellos, es hablar con los mismos, preguntarles y escuchar sus respuestas, es decir, realizar una conversación de dos vías.
A continuación, damos algunos consejos de actividades que podemos realizar con ellos y que ayudan a mejorar el tiempo que pases con tus hijos. Decir que cualquier oportunidad es válida y que muchas veces tenemos que utilizar nuestra imaginación. En definitiva, hagamos de lo cotidiano algo especial...
a) Paseos por la tarde al parque: después de recoger a los niños en el Colegio, no vayas directamente a casa, haz una parada en el parque, y disfruta con ellos de la naturaleza y el aire libre…
b) Si estás cerca de algún jardín, pueden dar un paseo y recolectar cosas, piedritas, hojas, ramas, plumas….y hacer una obra de arte: sólo necesitas una cartulina y pegamento.
Si no, abre tu despensa y saca pasta: pueden pintarla y hasta hacer collares; rescata algún corcho de botella de vino o abre tu costurero y busca botones, lentejuelas, estambre…
c) Ver algún programa de televisión de forma regular: normalmente, en todas las cadenas, existen programas infantiles donde después de merendar y hacer las tareas, con los que, tus hijos y tú, podréis relajaros y pasar un buen rato.
Pasar una hora viendo la tele con los niños es una buena actividad para estrechar los lazos familiares. Nos acercará más a ellos.
d) Cenar juntos: este es un momento para hablar y discutir de temas importantes. Es muy fácil, coger el hábito de comer delante de la tele, pero eso no hace nada más que arrebatarte tiempo para conocer mejor a tus hijos. Como algo divertido, se podría hacer una excepción el fin de semana.
e) Leerles o escucharles mientras leen: es una actividad excelente para el desarrollo del cerebro, permite mejorar las actividades lectoras, así como desarrolla una conexión cercana entre padres e hijos.
f) Dibujar y pintar juntos: si los niños son pequeños, una gran pieza de papel de periódico, o algunos libros para colorear con lápices de colores y echarte al suelo con ellos, es todo lo que necesitas para pasar un buen rato. Ejemplo: Se puede jugar a decir animales y que el niño te los vaya dibujando, y al revés, que el te los vaya nombrando y tu dibujarlos.
Tenemos que recordar que su capacidad de mantener la atención en una misma actividad no es igual que la nuestra. Un niño de 5 ó 6 años quizá tenga suficiente con 20 minutos, pero esos periodos se irán haciendo más extensos a medida que vaya creciendo.
g) Sentarnos con ellos a recortar ypegar puede ser una gran actividad. Pueden escoger un tema (animales, naturaleza, bebés…) y buscar imágenes relacionadas en una revista. Que recorten y luego armen un collage.
h) Hablar con ellos: Es muy sencillo como padre olvidar pasar uno o dos minutos para conectar con tus hijos como personas.
Muchas veces les decimos cosas como “Haz esto”, “Tienes que hacer aquello”, o “Deja de hacer eso”. Pero, lo que construye una relación de calidad con ellos, es hablar con los mismos, preguntarles y escuchar sus respuestas, es decir, realizar una conversación de dos vías. Debe ser un dialogo con el niño, no un interrogatorio. Debemos hacer preguntas abiertas donde el niño tenga la oportunidad de expresarse.