Para Andrea Porello aprender es un mosaico de citas de amor y de autor. Un mosaico porque remite a una técnica artística que se efectúa combinando elementos de diversos materiales, que se ligan con una sustancia capaz de unir fragmentos y dar cohesión al conjunto. Esta analogía permite comprender el aprendizaje como una obra pictórica, que se logra de manera artesanal ligando vivencias y productos culturales de diversos autores.
Para la autora el juego artístico es un espacio sanador donde la libertad, asociada a la creatividad, el deseo y la autoría se conjugan y ponen en escena los malestares, las angustias, los miedos, pero también los sueños, los deseos y la ilusión que anidan en la subjetividad de cada niño. En esta oportunidad, la autora trabaja con la obra de Agó Páez Vilaró, quien encontró en los mandalas su lenguaje plástico para transmitir su mensaje de paz.
Ricardo Rodulfo, en su prólogo, señala que Jugar, aprender y sanar “es un desarrollo y una reflexión que venía faltando acerca del concepto de experiencia cultural forjado tardíamente por Winnicott. Lo concerniente a los Mandalas plasma con plenitud el sentido de aquel concepto, que hace del jugar la punta del ovillo de una larga secuencia productiva, particularizada aún más por la superación del logocentrismo ya explícita en la factura misma del libro, en su materialidad más concreta: la propuesta de Porello integra palabras con relatos, música, plástica, objetos utilizables en un collage o en una perfomance; el libro mismo lo es, una auténtica performance, que apela y necesita de la actividad imaginativa del lector que lo recorra. No se limita a su decir, hace, opera, haciendo en el plano mismo del jugar y no solo en el plano de un contenido semántico que nos envía sin cesar al juego”.
Tanto docentes como terapeutas podrán valerse de este libro/herramienta para propiciar un tipo de encuentro que suscita el juego artístico, que es un tipo de encuentro íntimo donde ningún participante sale igual. Jugar, aprender y sanar ofrece recursos para reflexionar y accionar, aporta “un modo de hacer” que tiene efectos en los sujetos, sus relaciones con los otros y con la cultura.
1. La creatividad en el aprender
2. La creatividad como rasgo humanizante
3. El arte en el centro de la escena
4. Mandalas. Arte para la paz, ¿qué nos ofrece el Programa?
5. Perfil y rol del terapeuta/educador durante la intervención
6. Programa de intervención denominado Mandalas. Arte para la paz
7. Recursos para la evaluación del programa de intervención. Mandalas. Arte para la paz
Editorial: Lugar editorial
ISBN: 9789508925800
Páginas: 208
Idioma: Español
Encuadernación: Rústica