La inteligencia lingüística está asociada a poder expresar nuestro lenguaje y a la habilidad de poder exponer nuestras ideas. La inteligencia lingüística inicia su desarrollo desde los primeros años de vida; interrelaciona nuestro aparato fonador, nuestro lóbulo temporal y el entorno en que nos desenvolvemos.
Nos referimos a la inteligencia lingüística cuando hablamos de la capacidad para comunicarnos tanto de manera verbal como escrita. La inteligencia lingüística está asociada a poder expresar nuestro lenguaje y a la habilidad de poder exponer nuestras ideas.
Este tipo de inteligencia se distingue en personas que tienen grandes habilidades comunicativas, facilidad en el aprendizaje de nuevos idiomas, capacidad para persuadir, crear historias, escribir poemas, para expresar sus ideas con fluidez y comprender a otros a través de la comunicación verbal o escrita.
En buena medida este tipo de inteligencia se conecta con la inteligencia musical y la inteligencia lógico-matemática dado que tiene que ver con el área del cerebro capaz de reconocer y producir patrones y ritmos, en este caso expresados por el lenguaje verbal.
La inteligencia lingüística inicia su desarrollo desde los primeros años de vida; interrelaciona nuestro aparato fonador, nuestro lóbulo temporal y la sociedad en la que nos desenvolvemos, pues el lenguaje también es un fenómeno social.
La inteligencia lingüística no solo implica el manejo oral y escrito del lenguaje, sino su comprensión como un sistema de representación de la realidad, lo cual se traduce en formas más complejas de expresión.
Características
¿Cómo desarrollar o potenciar la inteligencia lingüística?
En la actualidad se cuenta con información muy variada sobre la relación entre la neurolingüística, la inteligencia lingüística y el proceso de enseñanza-aprendizaje. Si atendemos a las aportaciones de la neurolingüística, podemos hacer mención de aspectos y estrategias a tener en consideración en el proceso de enseñanza-aprendizaje para el adecuado desarrollo de la inteligencia lingüística.
En los preescolares, la inteligencia lingüística les facilita establecer relaciones interpersonales adecuadas, establecer vínculos afectivos y expresar sus sentimientos y emociones.