En el artículo se analizan dos orientaciones de la psicología científica actual: la psicología cognitiva y la psicometría. Se da una sucinta visión histórica de la psicología cognitiva que, usando metodologías que permiten estudiar comportamientos observables en condiciones experimentales bien controladas y haciendo uso frecuente de modelos y técnicas matemáticas sofisticados (análisis multivariados, modelos exponenciales, etc), avanzan sobre el conductismo al interesarse por los procesos internos de la mente.
Posibilidad de integración de las teorías cognitivas.
Referencia: Revista Argentina de Neuropsicología 1, 8 –23 (2003)
“...Ninguna investigación merece el nombre de ciencia, si no pasa por la demostración matemática.”
Leonardo da Vinci, Tratado de la Pintura VII, Buenos Aires, Espasa-Calpe.
1. Introducción
Seguramente el hombre desde su misma aparición en la tierra se interesó por conocerse a sí mismo y a sus semejantes. En este sentido, podemos decir que la psicología es tan antigua como el hombre mismo pues en realidad los ensayos para hilvanar sus conocimientos psicológicos puede decirse que comienzan con el famoso “γνωσι σε αυτον“ (Conócete a ti mismo) inscripto en el frontispicio del templo del oráculo de Delfos de los antiguos griegos. Sócrates se interesa profundamente en el ser humano, pero el ser humano captado en una perspectiva esencialmente moral. Las nociones de justicia, verdad, virtud y felicidad expresan a su juicio la verdadera naturaleza del hombre. La concepción socrática del alma es inseparable de la filosofía de la sabiduría que engloba a todas las demás virtudes (piedad, justicia, templanza, etc.) y de una sabiduría que se puede enseñar a través de su famosa mayéutica; su “solo sé que nada sé” es simplemente un proceso didáctico. Platón tratará de demostrar que el alma es absolutamente incorpórea con destino sobrenatural. En el Fedón, Platón compara el alma con un carro con dos caballos conducido por un cochero. El cochero simboliza la razón, uno de los caballos la energía moral y el otro, el deseo. El alma está en el cuerpo como un piloto en su navío para conducirlo y dominarlo. La psicología de
Aristóteles apuntará a criticar este idealismo platónico y a rehabilitar la sensación como fuente del conocimiento, estableciendo además casi todos los pasos de la lógica del pensamiento. Pero tanto en la Grecia Clásica (Platón y Aristóteles) como en el
Medioevo (San Alberto y Santo Tomás), a pesar de haber formulado muchas ideas sobre el mundo psicológico, el hombre fue pensado siempre como el compuesto de alma y cuerpo desde la trascendencia y en el contexto ontológico de la metafísica y de la teología. Más que analizar cómo era el hombre, se hacían propuestas de cómo debía ser su moral (ética) o su forma de llegar al conocimiento (lógica). Pero en todos los clásicos encontramos una tendencia a la universalidad, una orientación hacia la totalidad de los objetos y una actitud intelectual, racional del pensamiento que convierte a su saber en filosofía. No existe una actitud dirigida específicamente al mundo psicológico. La concepción científica del psiquismo comenzará con la crisis epistemológica de esta visión metafísica en la Baja Edad Media y lo que iba a preocupar en este nuevo enfoque, no era ya responder a la pregunta estática y especulativa de “qué es el alma” sino a la más dinámica y funcional de “como actúa”. Así podemos leer en Luis Vives (1538): “No es cosa que nos importe demasiado saber que es el alma, aunque sí y en gran manera, cómo es y cuáles son sus operaciones”.
Junto a la revalorización de la persona humana y su subjetividad en el Renacimiento tuvo lugar la reivindicación de la Naturaleza y del saber natural sobre la misma que dio origen a la moderna noción de ciencia, con características diferentes de la episteme esencialista griega y medieval. La psicología científica nace en el siglo XIX, con la creación del Laboratorio de Wundt en Leipzig en 1887 y define el comienzo de la psicología experimental con los trabajos de Herbart, Weber, Ebbinhaus, Fechner, aunque no todas las escuelas del siglo XX han seguido los procesos metodológicos de las ciencias naturales. Ha habido muchos enfoques en distintas direcciones.
En la primera mitad del siglo XX la psicología, especialmente en los EEUU, se aferró al conductismo que utilizó los métodos experimentales, sobre todo para estudios de sujeto único.