Pensemos ahora brevemente en lo que la sociedad demanda o parece demandar. Estamos asistiendo a un rápido cambio en las escalas de valores, tendencias, actitudes y creencias y todo ello origina nuevas necesidades a las que habrá que dar soluciones originales y creativas en la medida en que la situación es nueva y no hay otras anteriores similares que hayan establecido precedentes.
EN QUÉ TEORIA NOS APOYAMOS
Planteadas estas diferencias en cuanto a términos podemos contemplar el panorama de las muy diferentes teorías educativas podemos encontrar en cualquiera de los ámbitos educativos. Por utilizar alguna de las muchas clasificaciones posibles y sin entrar a valorar si es la mejor, utilizaré a de la tesis doctoral de Marrero (1988).
TEORÍA |
Implícita -dependiente | Es logocéntrica, se apoya en la sabiduría del profesor y es reproductora de los valores institucionales, los cuales son impuestos a los alumnos. |
Productiva | Implica un equilibrio entre eficacia[1] y eficiencia[2]. Le interesa ver la proporción de los productos de aprendizaje en función de lo "dado" durante el proceso, pero no olvida la relación de los productos y el coste en recursos. |
Expresiva | Podría ponérsele el eslogan: "aprender haciendo", que nos recuerda a Dewey. El alumno realiza actitudes sin tregua y de modo permanente que le sirven para representar sensiblemente sus ideas, deseos y sentimientos. Todo es una preparación para la vida. |
Interpretativa | Se centra en la búsqueda del sentido e interpretación de los mensajes y fenómenos. Es paidocéntrica y empirocéntrica, por lo que pone mas énfasis en el proceso que en el producto. Las relaciones entre el formador y el participante nunca son de dependencia, sino participativa y en todo caso, democráticos. |
Emancipatoria | La formación tiene como objetivo librar al alumno de cualquier tipo de alineación y dependencia, sobre todo en lo ideológico, político y moral. Es el polo opuesto a las teorías reproductivas. Es una teoría crítica que estimula la participación de los alumnos. No olvida la importancia que tienen el contexto social y por tal se valora en todo momento. |
[1] Eficacia: Virtud, actividad y poder para obrar (Eficaz) [2] Eficiencia: Econ. – Utilización racional de los recursos productivos adecuándolos con las tecnologías existentes
|
Es evidente que para cada una de ellas o de cualquier otra que nos quisiéramos plantear se necesitará un tipo distinto de docente por lo que para poder establecer un perfil coherente del profesorado tendremos que partir de una serena reflexión de qué es lo que la sociedad demanda de la educación en el entorno concreto en que nos movemos, qué teoría educativas y del aprendizaje sustentan nuestra labor docente y con qué corrientes pedagógicas y metodológicas nos pretendemos desarrollar esa labor.
LA SOCIEDAD DEMANDA
Pensemos ahora brevemente en lo que la sociedad demanda o parece demandar. Estamos asistiendo a un rápido cambio en las escalas de valores, tendencias, actitudes y creencias y todo ello origina nuevas necesidades a las que habrá que dar soluciones originales y creativas en la medida en que la situación es nueva y no hay otras anteriores similares que hayan establecido precedentes.
Estamos presenciando cambios muy acelerados y trascendentes que modifican la forma como vivimos, como trabajamos y como educamos a nuestros niños; en particular las T.I.C. están cambiando los esquemas y algunos de los objetivos de la educación.
1.Eficacia: Virtud, actividad y poder para obrar (Eficaz)
2.Eficiencia: Econ. – Utilización racional de los recursos productivos adecuándolos con las tecnologías existentes