Que yo conozca de la realidad no significa que yo conozca
EL CONSTRUCTIVISMO COMO CORRIENTE EPISTEMOLÓGICA.
En nuestro país (Argentina), y también en otros, esta corriente llegó a configurar "un patchwork"- nos dice Castorina- . Un recorte multicolor de conceptos, concepciones psicológicas, educativas, epistemológicas y didácticas. Por ello, el término constructivismo perdió consistencia intrínseca y se transformó en una concepción vaga que podía interpretarse de múltiples maneras; hasta pasó por la ética y la visión del mundo, "un verdadero despropósito".
Nuestro autor, lo restringe a la epistemología, no habla de psicología, ni de pedagogía, ni de los problemas de la educación. Para él, el constructivismo es una "posición de la concepción del conocimiento, es una cuestión epistemológica".
Distingue cuatro tipos de constructivismo: el de Piaget – un tanto renovado a la luz de nuevas investigaciones- , el radical – cuyo exponente más destacado resulta ser Von Glaserfeld- , el social – de Gergen, Edwards y otros- y la propuesta que realizaron los estudiosos españoles en el marco de su reforma educativa. Si bien hay entre ellos diferencias bien marcadas, a todos los une la idea central de que hay que acabar con el dualismo- escisión- en psicología. El rechazo a la idea de que haya un sujeto que aprende separado del objeto de conocimiento.
El constructivismo radical:
Esta concepción del constructivismo, ha influido fuertemente sobre la enseñanza de las ciencias. La premisa fundamental de Von Glaserfeld, es que sólo construimos nuestra propia obra. No conocemos al mundo, sino lo que hacemos y construimos en el mundo. "Si un pensador no se pronuncia sobre el mundo real, no es constructivista"- explica Castorina-
Nos acercamos al mundo, porque no lo construimos. El pensamiento no es la representación de la realidad, se construye de acuerdo al campo de la experiencia real personal, no la del mundo. "Ser, es ser percibido", yo sé lo que construyo, conozco lo que mi abstracción, mis posibilidades de experiencia y mi capacidad de inferencia me permiten.
Que yo conozca de la realidad no significa que yo conozca "la realidad". Por eso mismo, nos dice Von Glaserfeld, si uno se posiciona como constructivista, no puede de ningún modo, ser realista (este ser realista que él define y plantea). "Nosotros no tenemos manera de conocer el mundo", salvo aquello que desde el campo de la experiencia personal podemos construir.
En ese campo experiencial, yo construyo al otro (ser social). Para nuestro autor en cuestión, no hay un saber objetivo, sino compatibilidades conceptuales. Las palabras no transmiten ideas ni conocimiento, sino que pueden ser compatibles con lo que el que escucha tiene. Y llega, entonces, a estas conclusiones generales acerca del conocimiento:
- el conocimiento no es pasivo
- no se transmiten significados
- es construido por el sujeto cognoscente
- es adaptativo, tiende al ajuste
- sirve para organizar el mundo experiencial, no para el descubrimiento de una realidad ontológica
Podríamos decir, respecto a esto, que Von Glaserfeld, se contradice en su postura al afirmar que el conocimiento es subjetivo, cuando pretende - epistemológicamente- afirmar estos conceptos como objetivos y reales, y no como un constructo humano.
Una consecuencia importante se nos presenta al analizar su influencia en la enseñanza, puesto que rechaza la idea de transmisión social del saber científico y transforma a la enseñanza de la ciencia en un objetivo puramente instrumentalista, poco motivador y alejado – por ser sólo modelos observables de los fenómenos científicos- del mundo en el que viven los alumnos.