En teoría se parte del principio de la igualdad de derechos y el respeto a la diversidad, para lograr construir una sociedad abierta, más justa y más humana.
Preámbulo.
El milenio que recién comienza se inicia con diversas expectativas y variables, desafíos para todo el mundo, en una sociedad cada vez más competitiva y globalizada. Nos encontramos frente a una que va creciendo paulatinamente y, que inexorablemente tiende a abrir sus puertas hacia "noveles" visiones de futuro y modelos de desarrollo; a múltiples cambios, científicos y tecnológicos, políticos y económicos, sociales y culturales, etc. Desde esta perspectiva, son nuevas necesidades y demandas las que el Estado -con sus políticas sociales- debe asumir y responder. En este contexto, la educación a nivel macro es percibida como un sector "inserto en la realidad Política, Social y Económica de un país" que trata de resolver entre otros, a través de las políticas educativas, algunos problemas educacionales concretos como los de la calidad y la equidad en la educación.
De acuerdo a este postulado -inicial de trabajo- se desea en éste documento, escudriñar tentativamente un "viejo" dilema relacionado con las comunidades indígenas que forman parte de la realidad nacional –en el sur del país- y su integración efectiva en el sistema escolar, reafirmando la relación y dependencia que se puede establecer entre equidad y educación intercultural -bilingüe o EIB- considerando una propuesta que permita una relación más armónica y equilibrada entre perspectivas culturales disímiles - por ejemplo las respectivas cosmovisiones, etc. - que no obstante, forman un solo pueblo, comparten un "territorio, ciertas tradiciones y una raíz común", a través de la historia de Chile, la mezcla de sangre y el inevitable proceso de aculturación a lo largo de los años, producto del contacto diario y también hasta cierto punto del sistema escolar que en alguna medida ha tendido a homogeneizar la enseñanza y la cultura de la nación.
Razones que justifican la elección del tema: Las denominadas minorías étnicas.
La creciente presencia de minorías étnicas -Mapuche, Huilliche, etc.- en nuestra zona y en la vida pública y cotidiana del país que se manifiestan reclamando algunos derechos o reivindicando otros frente al Estado y la ciudadanía a través de diversas organizaciones comunitarias -ejemplo: Aukin Wallmapu Ngulame o El Consejo mapuche de Todas las Tierras- incluso gubernamentales -como la CONADI- o expresiones de carácter público que en algunas ocasiones incluso adquieren un tono violento - es algo que indudablemente –tarde o temprano- no se puede soslayar e ignorar, de otro modo las consecuencias pueden llegar a ser imprevisibles al hipotecar un fragmento del futuro -de la nación- si no se intenta atender las necesidades de todos –absolutamente todos- sus miembros, pese a lo arduo y difícil que pueda resultar por la complejidad de los procesos sociales involucrados. La historia en general -la contemporánea en particular- nos ofrece una larga y aleccionadora muestra de los distintos grupos que por diversas razones –étnicas, políticas, culturales, religiosas, etc.- han llegado incluso a recurrir a soluciones armadas para resolver sus conflictos o sostener sus posiciones.
Debemos tener presente por ejemplo que Los Mapuches en nuestra realidad constituyen el grupo indígena más grande de Chile, con casi un diez porciento de la población lo que equivale aproximadamente a un millón y medio de personas. Históricamente a lo largo de los años, fueron paulatinamente desplazados de sus territorios y finalmente para el término del siglo diecinueve -después de 1883 que coincide con la fundación de Temuco y la consolidación de la frontera en Cautín- derrotados militarmente e incorporados a las denominadas reducciones. Como resultado de su asimilación obligada al estado chileno -al menos hasta hace un par de años- todos los niños mapuches debían recibir educación formal en castellano con un currículum que habitualmente no consideraba -en plenitud- la cultura mapuche, su lengua y su identidad particular. Inevitablemente, éste es un tema no resuelto que desde una perspectiva -como elemento de la cotidianeidad- requiere soluciones concretas y que además también debería demandar la atención de la gestión educacional, al menos en parte, como fuente de futuras realizaciones.
Esta situación -la de las minorías étnicas como los mapuches- si fuese sometida a mayores sondeos de carácter socio-cultural a lo largo del territorio, probablemente demostraría que pese a los esfuerzos realizados hasta ahora por los distintos gobiernos, todavía subsiste hoy, una fuerte fragmentación social y falta de equidad que se traduce en una lamentable "marginación" de grandes núcleos de la población.
Una de las tantas premisas o fundamentos de nuestras políticas educativas, en esencia "... como actividad publica específica, que trata de solucionar problemas educacionales concretos" y "... de acuerdo a los contextos y programas políticos, etc."., de la última década a partir de la Reforma Educacional del 90 –y de los respectivos gobiernos de la Concertación- se basa en ofrecer igualdad de oportunidades a toda la población para acceder al conocimiento y satisfacer las necesidades de aprendizaje, para que todos los ciudadanos puedan estar óptimamente preparados para la vida, para el trabajo, con iguales aptitudes, valores y destrezas.
En teoría se parte del principio de la igualdad de derechos y el respeto a la diversidad, para lograr construir una sociedad abierta, más justa y más humana. El afán por conseguir esta igualdad en el acceso ha sido acompañada por una profunda desigualdad en el tipo de educación que se le ha brindado a los diferentes componentes del país, hasta mis días los alumnos indígenas debían olvidar todo lo relacionado con sus orígenes y su identidad, la consigna a la que tenían que someterse era la homologación a un modelo de educando de clase urbana, de cultura occidental y de hablantes que desde su nacimiento utilizan su lengua materna, el Español.
Algunos vínculos entre el tema, La L.O.C.E y La Declaración Universal de D. Humanos: Estableciendo alcances de carácter general.
La Asamblea General de las Naciones Unidas, el 10 de diciembre de 1948, promulgó la Declaración Universal de Derechos Humanos que a través de sus treinta artículos -y en consideración a la justicia, la dignidad, la libertad y la paz de los hombres- aspira establecer los derechos inalienables y las libertades fundamentales de todos los seres humanos. De ellos se destacaron los siguientes:
El Artículo 1 con respecto a la libertad dice:
"Todos los hombres nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros"...
El Artículo 26 en lo que atañe a la educación, señala en sus diversos incisos:
1."Toda persona tiene derecho a la educación. La educación debe ser gratuita, al menos en lo concerniente a la instrucción elemental y fundamental. La instrucción elemental será obligatoria. La instrucción técnica y profesional habrá de ser generalizada; el acceso a los estudios superiores será igual para todos, en función de los méritos respectivos".
2. "La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana y el fortalecimiento del respeto del respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales; favorecerá la comprensión, la tolerancia y la amistad entre todas las naciones y todos los grupos étnicos o religiosos, y promoverá el desarrollo de las actividades de las Naciones Unidas para el mantenimiento de la paz".
3."Los padres tendrán derecho preferente a escoger el tipo de educación que habrá de darse a sus hijos".
La Ley Orgánica Constitucional de Enseñanza o L.O.C.E. fue promulgada el 7 de marzo de 1990, por La Junta de Gobierno, dando cumplimiento a lo dispuesto en el N°1, del artículo 82 de la Constitución Política de la República de Chile, en el año 1981. Esta última en particular, establece los principios básicos que orientan el Sistema Nacional Escolar considerando a la educación como un derecho fundamental que debe ser alcanzado a través de la Libertad de Enseñanza. El Estado como entidad al servicio de las personas y la comunidad, debe velar por el cumplimiento de aquello. La L.O.C.E. señala entre otros que la educación es un derecho de todas las personas, que los contenidos mínimos obligatorios serán señalados en conformidad con ella, que los requisitos mínimos para los niveles de la enseñanza básica y media y las normas objetivas que permitan al Estado tutelar su realización también estarán determinados por dicha ley, etc.
Evidentemente los dos cuerpos legales, en las respectivas dimensiones en que fueron formulados y promulgados, no solo se parecen y tienen algunos aspectos en común. Ambos tienden, en parte, a establecer los derechos y deberes de los hombres y, el alcance del papel de los Estados en el cumplimiento de la normativa legal vigente.
"En los Estados en que existan minorías étnicas, religiosas o lingüísticas o personas de origen indígena, no se negará a un niño que pertenezca a tales minorías o que sea indígena el derecho que le corresponde, en común con los demás miembros de su grupo, a tener su propia vida cultural, a profesar y practicar su propia religión, o a emplear su propio idioma" Carta de los Derechos del Niño (Art.30). Basados en este artículo -e inspirados por el espíritu de La L.O.C.E. y La Declaración de Derechos Humanos- debemos mencionar que no se ha llegado aún a crear una estrategia explícita de integración social para la población de ascendencia indígena, la cual pese a ver sufrido un proceso de aculturación considerable, siempre ha manteniendo sus tradiciones y creencias, en suma su cultura. El problema se encuentra latente, pues son grupos que difieren en parte social y culturalmente del resto de la población, lo que produce un conflicto de exclusión, y de ocultamiento social por parte de la cultura dominante. A pesar de que poco a poco muchos de los miembros de las denominadas minorías étnicas van perdiendo su lengua materna, estos núcleos -o reducciones- mantienen su tradición bilingüe a sí mismo su unidad por medio de asociaciones que han tenido un papel integrador.
Nuestro Sistema Escolar debe convivir con esta realidad, aceptando estos patrones, provenientes de diversas colectividades, esto requiere entonces, de acciones equitativas para dar oportunidades que permitan acceder a los códigos que caracterizan esta sociedad, global, integrada y multiétnica, son pueblos que tienen conciencias de sus derechos y aunque las políticas gubernamentales intentan satisfacer sus demandas, sus dificultades y sus problemas persisten.
Ciertamente son pueblos portadores de patrimonios dignos de respeto por cuanto de positivo aportan a la humanidad, es por lo tanto necesario y justo su integración a este mundo globalizado más específicamente a nuestro sistema educativo a nuestra cultura de la modernidad, pero sin olvidar su condición de etnia diferente.
La Carta de los Derechos Humanos nos señala que toda persona tiene derecho a la educación, sin mayor discriminación, no importando su raza, cultura o religión, además nos plantea que ésta debe ser gratuita al menos en lo relacionado a la instrucción elemental y fundamental, la cual es obligatoria. A sí mismo los padres tienen el derecho de escoger el tipo de educación que habrá de darse a sus hijos, así también la Ley Orgánica Constitucional nos ratifica lo anterior, la educación es un derecho de todas las personas en la cual los padres de familia tienen la obligación y el derecho de educar a sus niños. Estos documentos abordan al ser humano en sus relaciones con la sociedad, con la cultura, la educación y con los otros, por ende lo que destacamos es su planteamiento sobre los derechos de las personas y su inserción dentro del sistema educativo.