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El Método TEACCH fue estudiado y llevado a cabo por el Dr. Schopler en 1966 en la Universidad de Carolina del Norte (EEUU). Está creado específicamente para personas con TEA y se basa en ―entender a estas personas, es decir, en ver cómo aprenden, cómo experimentan dentro del mundo, cómo piensan, etc. Es un programa llevado a cabo para dar servicio a las personas con Trastornos del Espectro del Autismo y sus familias.
Autores como Fitzpatrick, Srivorakiat, Wink, Pedapati y Erickson (2016) destacan la efectividad de antipsicóticos (tratamiento farmacológico) para disminuir las conductas agresivas en personas con TEA o el uso de inhibidores de la serotonina para tratar las conductas repetitivas (Doyle y McDougle, 2012). Otras investigaciones apuntan la necesidad de usar un sistema de comunicación alternativo y/o aumentativo (SAAC) (Ganz, 2015) o el uso del Sistema por Intercambio de Imágenes (PECS) como resaltan Lerna, Esposito, Conson y Massagli (2014) a la hora de trabajar los aspectos comunicativos en estas personas y en otras con grandes dificultades en su desarrollo (Preston y Carter, 2009). Por último, destacar otras metodologías e intervenciones que se siguen estudiando y probando su evidencia científica en esta población como puede ser el Método Hanen que ayuda a mejorar el estilo comunicativo entre los niños con TEA y sus madres como destaca la investigación de Girolametto, Sussman y Weitzman (2007); el Método Loovas para trabajar la conducta adaptativa en un entorno comunitario (Cohen, Amerine y Smith; 2006) o el RT para trabajar aspectos emocionales en niños pequeños con TEA como apuntan Mahoney y Perales (2003) o Gerald, Perales, Wiggers y Herman (2006) entre otros. Pero merece gran atención, los tratamientos más utilizados y con mayor evidencia científica en personas con TEA que son las terapias conductuales (ABA) y combinadas (TEACCH), resaltando este último, por ser el tema de interés del presente trabajo y al que se le va a dedicar un espacio en concreto.
El análisis aplicado a la conducta (ABA) contemporáneo tiene como objetivo conseguir conductas apropiadas mediante refuerzos positivos y eliminar aquellas que no se deseen quitando consecuencias positivas con el fin de conseguir la extinción de dicha conducta (Mulas et al., 2010). Concretamente en niños con TEA se aplica los principios de este método de una manera sistemática, trabajando distintas áreas, como pueden ser, lectura, habilidades sociales, comunicación, actividades de la vida diaria, etc., (Pérez y Pérez, 2018). Uno de los métodos más utilizados dentro de ABA es el Entrenamiento en Ensayos Separados (DTT). Bajo esta concepción, se trabajan habilidades específicas siguiendo cuatro elementos básicos (Mulas et al., 2010):
Hay estudios que demuestran que, siguiendo esta metodología, los sujetos presentan una mejoría en CI y cambios positivos en las áreas del lenguaje oral, aunque dichos cambios no son significativos (Boyd y Corley, 2001).
Intervención Combinada: Método TEACCH
El Método TEACCH fue estudiado y llevado a cabo por el Dr. Schopler en 1966 en la Universidad de Carolina del Norte (EEUU). Está creado específicamente para personas con TEA y se basa en ―entender a estas personas, es decir, en ver cómo aprenden, cómo experimentan dentro del mundo, cómo piensan, etc. Es un programa llevado a cabo para dar servicio a las personas con Trastornos del Espectro del Autismo y sus familias.
Sus prioridades principales son proporcionar a la persona con TEA servicios a su entorno (colegio, familia, etc.), lograr que la persona se desenvuelva de manera independiente y generar conocimiento en todas las áreas alteradas tanto para las personas con TEA como para su contexto más inmediato (Cuadrado, 2021).
Es un método diseñado para personas con TEA independientemente de la edad que tenga o de las capacidades cognitivas que posea. Además, está instaurado en más de 20 países en todo el mundo.
Esta metodología persigue una serie de objetivos (Mesibov y Howley, 2003):
Consta de una serie de actividades, las cuales son: entrenamiento en habilidades a padres con hijos con TEA, desarrollo de habilidades sociales y de la comunicación, entrenamiento en búsqueda de empleo, etc., (Pérez y Pérez, 2018).
Esta metodología se basa en unas estrategias principales:
En la misma línea, esta metodología sigue una serie de principios educacionales:
Después, se debe señalar que este método se basa en el aprendizaje de aspectos en diferentes contextos a través de un equipo multidisciplinar en el cual, todos colaboran para conseguir los objetivos planteados; basándose en los siguientes componentes principales (Eikeseth, 2009):
Se debe establecer dentro de las aulas límites físicos y/o visuales claros y minimizar al máximo las distracciones visuales y auditivas dentro de los espacios en los que se desenvuelve el niño.
El método TEACCH es uno de los más utilizados en todo el mundo en niños con TEA ya que diversas investigaciones demuestran la eficacia y la mejora en distintas habilidades, como puede ser, las sociales, comunicación, etc., (Eikeseth, 2009), aunque aún sigue en investigación y validación por distintos grupos de investigadores especializados en la materia. Aun así, hay estudios que evidencian la reducción de la ansiedad en madres con niños con TEA que siguen esta metodología de intervención como apuntan D’Elia et al. (2014). Por tanto, se puede decir que el Método TEACCH se centra principalmente en mejorar las habilidades de la comunicación en personas con TEA y no tanto en enseñar el lenguaje, aunque también mejora en todas sus áreas, ya que proporciona vocabulario nuevo y pueden llegar a producir frases simples.
Por ello, se plantea el siguiente artículo con el objetivo de investigar en qué áreas presentan mejoría los niños con TEA usando esta metodología y cómo repercute en el estrés de dichos padres y probar la eficacia de dicho método.