Dentro de las acciones diseñadas están los talleres, que constituyen una forma de educación donde se construye colectivamente el conocimiento con una metodología participativa didáctica, coherente, tolerante frente a las diferencias, donde las decisiones y conclusiones se forman mediante mecanismos colectivos y donde las ideas comunes se tienen en cuenta.
Las acciones han sido elaboradas tomando como referencia las características de las niñas y niños de 1 a 2 años. Por lo que se toman en consideración las siguientes ventajas:
Constituyen un medio eficaz que brinda al promotor diferentes vías para potenciar el trabajo con las ejecutoras y de estas a las familias.
Preparan al promotor en función de obtener mejoras en su accionar.
Ofrecen variantes que le permiten comprender la importancia de realizar un trabajo sistemático.
Propician un estado emocional positivo en niñas y niños, manteniéndolos activos durante la vigilia.
Los conocimientos que se transmiten constituyen vías elementales relacionadas con la estimulación de la motricidad fina, para ser aprehendidos por los promotores, ejecutores y familias de manera sencilla, agradable y duradera, las mismas pueden ser implementadas dentro del horario de la vigilia del niño, por la cual estas se realizarán a través de diferentes juegos, propuestas de canciones y se complementa con variadas actividades conjuntas que en su tercer momento tienen implícitos los talleres, que servirían como temas para la reflexión y el debate con las ejecutoras.
Para la puesta en práctica de estas acciones se tuvieron en cuenta las etapas que se proponen a continuación: (ver esquema 2)
Esquema 2
Diagnóstico: con el objetivo de buscar potencialidades, carencias e intereses, a partir de la aplicación de instrumentos y técnicas, que permitan declarar las insuficiencias de los promotores en los elementos relacionados con la estimulación de la motricidad fina en las niñas y niños de 1 a 2 años, para conducir la preparación de ejecutores voluntarios.
Planificación: se crean las condiciones necesarias para la puesta en práctica de las acciones de preparación de los promotores en la estimulación de la motricidad fina.
Ejecución: se materializan las acciones diseñadas cumplimentándose cada uno de los objetivos propuestos.
Control y evaluación: en esta etapa es donde se logra la transformación de los promotores a partir de la concreción de las acciones recibidas, y su evidencia en la transformación de estos para potenciar el máximo desarrollo integral posible de las niñas y niños.
Propuesta de acciones de preparación a los promotores para la orientación a las ejecutoras en la estimulación de la motricidad fina en las niñas y niños de 1 a 2 años.
Todas las acciones que se realizan van encaminadas a potenciar el desarrollo integral de las niñas y niños, siendo interés de la autora potenciar la estimulación de la motricidad fina.
Los promotores, ante el encargo social encomendado son los responsables de que se materilice esta aspiración en nuestros infantes, de ahí la necesidad de su mejor preparación para que puedan evaluar, controlar y demostrar a las ejecutoras los mecanismos necesarios para la preparación óptima de la familia y que esta esté consciente del papel que le corresponde en el cumplimiento de estos principios, para que puedan incidir en el desarrollo integral del niño desde las primeras edades.
La evaluación de estas acciones estará en correspondencia con la participación activa y sistemática de los promotores, las vías y medios utilizados, la valoración de la calidad de los temas impartidos, demostrando dominio de esos conocimientos y las habilidades adquiridas para la preparación de las ejecutoras voluntarias.
Dentro de las acciones diseñadas están los talleres, que constituyen una forma de educación donde se construye colectivamente el conocimiento con una metodología participativa didáctica, coherente, tolerante frente a las diferencias, donde las decisiones y conclusiones se forman mediante mecanismos colectivos y donde las ideas comunes se tienen en cuenta.[8]
Los talleres propuestos van a contribuir a la preparación de los promotores, a partir de adquirir conocimientos acerca de las características de las niñas y niños de 1 a 2 años, qué medios pueden ser utilizados para el desarrollo de diferentes actividades, así cómo las formas de organización de las actividades conjuntas para poder orientar a las ejecutoras en lo relacionado a la estimulación de la motricidad fina.