Mapas mentales y lectoescritura.

1. ¿MAPA CONCEPTUAL O MENTAL?

Nuestra propuesta de trabajo es híbrida entre los denominados Mapas Conceptuales y los Mapas Mentales. De los primeros tomamos la fundamentación que Novak (1998), precursor de los mismos, hizo de los trabajos de Ausubel (1988) sobre cómo el aprendizaje se hace significativo cuando la persona, de forma consciente, vincula los nuevos conceptos a otros que ya posee. Novak afirma que los Mapas Conceptuales obligan al alumno a relacionar, a jugar con los conceptos y sus conexiones mediante la construcción de enlaces y jerarquías. De esta forma se ve obligado a interiorizar los contenidos de las diferentes materias y entra en un proceso activo donde los nuevos conceptos son adquiridos por descubrimiento y presta realmente atención a sus relaciones con la posibilidad de generar ideas nuevas y creativas.

Desde los Mapas Conceptuales trazamos un nexo con los Mentales de Buzan (2005) pues creemos que éstos son más idóneos para la intervención con alumnos que tienen dificultades con la lectura y la escritura. Los Mapas Mentales nos permiten partir de una idea central, poderosa, de la que derivan otras afines que pueden ser reforzadas con colores, lógica, sonidos, ritmo visual, números e imágenes. En la mente del alumno se forma un todo global que debe plasmar en el Mapa Mental a través de diferentes posibilidades.

Muchos alumnos no saben por dónde empezar cuando se proponen hacer una redacción. En su cerebro surge un pensamiento irradiante (Buzan, 2005) que se expande en múltiples ramificaciones, y les cuesta encauzarlo a nivel fonético, morfológico, sintáctico y textual. Cuando se pone a construir su Mapa Mental puede conseguir asociar y vincular la multitud de conceptos que pueblan su universo personal. En el apartado 4. Ejemplos veremos, cómo realizar una redacción, por ejemplo, sobre Mis mascotas, genera en la mente del alumno enlaces intuitivos y rápidos que plasma en la pantalla: gatos, perro y tortuga. Con la ayuda de plantillas irá poco a poco componiendo oraciones con palabras, imágenes y sonidos. Jugará con ellas hasta componer párrafos que puede escuchar o revisar con un corrector ortográfico y también añadir otros nuevos con la ayuda de un predictor informático.

Rivera (2004) ha investigado con alumnos chilenos sobre el empleo de Mapas Mentales en la comprensión y elaboración de textos. Afirma que, con las estrategias propuestas, se estimulan en los estudiantes:
- La metacognición y la metacomprensión de textos orales o escritos.
- La capacidad de visualización, organización y producción de textos
- La utilización de los conocimientos previos
- Las habilidades superiores de pensamiento
- Las estrategias de pensamiento reflexivo y no lineal.
- El pensamiento creativo.

El software para construir Mapas Mentales es amplio. Inspiration2, Visual Mind3, SmartDraw4 o IHMC-Cmap5, son buenos ejemplos. Unos son gratuitos y otros comerciales. Unos corren bajo Windows y otros con GNU/Linux. También hay un número interesante de software para PDA (Personal Digital Assistant).

2. REDACTAR UN TEXTO

Scott y Vitale (2003), figura 1, nos muestran de forma esquemática el modelo del proceso de escribir que ellos utilizan con alumnos que presentan dificultades de aprendizaje6. La rueda la dividen en 5 secciones desiguales, cada una de ellas con un subproceso que contiene un listado actividades que el alumno debe realizar. Veamos cada una de ellas:

Planificación (Prewriting).- Es la situación de partida e invita, antes de empezar a escribir, a generar ideas y organizarlas. Se pueden hacer fluir como una tormenta con el apoyo de videos, fotografías y experiencias personales, familiares o de sus amigos. Es en la recogida de información donde los Mapas Mentales participan activamente. Tomkins (2000) afirma que el 70% del proceso de escritura se dedica a esta fase de planificación.

Borrador (Drafting).- En esta etapa los alumnos tratan de desarrollar sus ideas utilizando palabras con significado; se trata de formar oraciones y párrafos. Redactar este primer borrador requiere tanto pensar como poner en marcha el proceso mecánico de escribir. Como veremos posteriormente en el proceso de Escritura Estructurada utilizamos plantillas para organizar las ideas y generar un esquema como borrador del texto.

Revisión (Revising) - Los alumnos deben leer, releer y evaluar lo que han escrito. Pueden utilizar las funciones de edición del procesador de texto y corregir los errores de puntuación y ortografía. El estudiante amplía sus oraciones usando diferentes clases de palabras (adjetivos, adverbios, preposiciones, etc.). También mejora el vocabulario con la ayuda del diccionario informatizado que le ofrece diferentes alternativas para que compare las palabras de su documento con las de éste y, si no son iguales, le ofrece una lista de posibles alternati­vas. Él sabe que no están todas las pala­bras y que la máquina no entiende el contexto, pero es muy agradable poder corregir el propio trabajo sin dejar rastro.Edición (Editing).- En esta etapa los alumnos editan su borrador cuidando todos los aspectos de la escritura: la ortografía, la sintaxis, la estructura organizativa y la elección de palabras y contenidos.

Publicación (Publishing).- Una vez que el proceso de escribir está totalmente acabado (generalmente después de múltiples revisiones), una quinta y culminante actividad es compartir el producto final con otros o publicarlo. Se puede optar por hacerlo en el tablón de anuncios de clase, en un Blog, etc. El propósito es proporcionar una mayor audiencia a su experiencia personal de escribir e invitarlo a sentir el orgullo de ser autor.

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