Insidia significa Acechanza, el diccionario lo refiere a toda acción que tiene como intención hacer daño a otro. Esa acción, además, transcurre de manera oscura, silenciosa, solapada….
Insidia del desarrollo patológico del lenguaje.
Pareciera contradictorio vincular un concepto tan fuerte como el de insidia con el campo del lenguaje y específicamente cuando su dificultad se manifiesta como disfunción en el desarrollo. En realidad ha sido costoso el hallazgo de este término, y aunque lo seguimos discutiendo en distintos ámbitos fonoaudiológicos, pareciera también que, con el tiempo, se amplía y se consolida.
Insidia significa Acechanza, el diccionario lo refiere a toda acción que tiene como intención hacer daño a otro. Esa acción, además, transcurre de manera oscura, silenciosa, solapada….
El término insidia se ha inscripto desde siempre en aquellas enfermedades que cursan de manera sub-clínica, a-sintomática y que se hacen evidentes cuando ya están instaladas. Son enfermedades que transcurren de manera insidiosa.
Nuestra práctica cotidiana referida al tema que nos ocupa es harto descriptiva: es alta la frecuencia con la que los niños y las niñas portadores de una patología lingüística -con déficit en el aspecto semántico, retardo afásico, y/o fonológico-sintáctico-inician una escolaridad de enseñanza regular. Las dificultades se detectan en el aula, no antes, y dependiendo de la severidad del cuadro, esto sucederá en el primero, segundo o tercer ciclo escolar si es que antes no se produce una deserción. Es interesante aclarar que raramente se detecta como dificultad de lenguaje, lo que aparece como evidente es el impacto que dicha dificultad ha provocado en los aprendizajes escolares, aquí se presenta un interesante nudo a desatar.
¿Qué es lo que produce el enmascaramiento de la dificultad de lenguaje o dicho de otro modo como se gesta la insidia en los trastornos funcionales del lenguaje en el curso del desarrollo?,
La difusión de estos temas ha sido posiblemente condicionada por una gran cantidad de mitos que aún circulan y a los cuales sigue siendo muy costoso desterrar, muchos de ellos transformados en verdaderas profecías que finalmente se cumplen en lo aparente, por ejemplo: “No se preocupe, es pequeño todavía, no se ponga ansiosa” a lo que se agrega a modo de vaticinio: “Ya va a hablar”
Si bien la escasa difusión de estos temas provoca fallas de importancia en el ámbito de la prevención en agentes de la salud vinculados con el crecimiento y desarrollo de las personas, no deberíamos atribuir a este aspecto una total responsabilidad.
En el intento de analizar posibles causas para la insidia acerco este concepto al que trataré de “abrir” apenas formulado: la multiplicidad de factores que intervienen y atraviesan la organización funcional del lenguaje permite un aditamento compensatorio de alto rendimiento social.