Revisión bibliográfica Espacio Logopedico . | 1/10/2024

El desarrollo de la lectoescritura es la base de un aprendizaje mucho más amplio. Las dificultades en el aprendizaje de la lectoescritura normalmente van unidas al fracaso escolar; por ello es importante trabajar de manera preventiva, para lo cual es importante conocer el proceso de lectoescritura en cada etapa.

Aprender a leer y escribir es un proceso complejo que requiere habilidades visuales, auditivas y grafomotrices; además, hay que asegurar el desarrollo de los códigos comunicativos: conciencia fonológica, conciencia ortográfica, conciencia de las palabras, conciencia sintáctica, decodificación rápida, comprensión verbal y conciencia pragmática.

Para prevenir dificultades en estas capacidades debemos trabajar aspectos como la motricidad fina, las praxias bucofonatorias, la coordinación óculo-manual, los movimientos sacádicos de los ojos, de seguimiento y fijación o lateralidad.

Causas de las dificultades en el aprendizaje de la lectura

• Uno de los obstáculos surge al discriminar visualmente las letras. Algunas tienen un gran parecido visual (m, n; e, c). en otros casos las letras están en espejo (p, q; b, d).
• Se debe aprender a segmentar las palabras en sus fonemas.
• Otra dificultad es establecer la relación entre las letras y los sonidos correspondientes.
• Hay letras muy parecidas que se pronuncian diferente (i, j; E, F).
• Otras letras tienen forma diferente, pero se pronuncian igual (a, A).
• Hay grafemas formados por dos letras (ch, ll).
• Hay consonantes que tienen diferente pronunciación en función de la vocal que le sigue (c, g).
• Otra dificultad es automatizar la relación entre las letras y los sonidos.

Tipos de dificultades en el aprendizaje de la lectura

• El aprendizaje de las letras-sonido
• La automatización de esas reglas

Lo más recomendable es iniciar el proceso de enseñanza en las edades que el desarrollo psicoevolutivo del niño demanda dicho aprendizaje de forma natural. Muchas investigaciones han demostrado que dicha edad es entre los tres y seis años.

Por otro lado también requiere que el profesorado esté muy bien preparado tanto teórica como prácticamente para tal aprendizaje.

Se ha demostrado que un niño entre los dos y tres años puede leer textos simples ilustrados, siempre y cuando un adulto le muestre el texto e interactúe con él. Entre los tres y cuatro años puede ir ligando el significado parcial del texto con las páginas del libro, apoyándose en las ilustraciones. Después de los cuatro años puede leer libros que relatan historias familiares para el niño.

Algunos requisitos que se recomienda que tengan los libros para iniciar la lectura son:

• En cuanto a temas:

• Animales domésticos que hablan
• Cuentos maravillosos sencillos
• Aparatos mecánicos (coches, tractores, etc.) personificados
• Humor
• Ambiente familiar (hogar, escuela, juego)

• Contenido

• Con argumento (planteamiento, nudo y desenlace)
• Suspenso y acción
• Evitar descripciones excesivas
• Desenlace rápido
• Puntuación cuidada
• Comprensible y que convenza
• Vocabulario sencillo

• Formato

• Atractivo a la vista
• Con ilustraciones preferiblemente a color
• Tipografía grande y clara

• Se recomienda crear una atmósfera gratificante donde la interacción lingüística esté centrada en el niño

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