Es común que los bebés con síndrome de Down tengan una boca pequeña y el cráneo tiende a ser más corto y más ancho que en un típico niño (braquicefalia). El puente nasal es plano y los pliegues epicánticos están presentes. Las complicaciones de la disfagia también pueden incluir aspiración, y problemas respiratorios.
El Síndrome de Down se ha identificado como una condición que presenta disfagia de manera prominente (Arvedson y Brodsky, 2002). De hecho, Campo, Garland y Williams (2003) estimó que aproximadamente el 80% de los niños con síndrome de Down experimentan dificultades en la alimentación.
Los niños pequeños con síndrome de Down tienen deficiencias significativas en la función motora oral (Spender, Stein, Dennis, Reilly, Percy, y Dale, 1996). Las complicaciones de la disfagia también pueden incluir aspiración, y problemas respiratorios, tales como neumonía recurrente, y la enfermedad respiratoria crónica – que puede resultar en una mala nutrición y retraso en el desarrollo (Frazier & Friedman, 1996).
Los niños que son propensos a tener problemas respiratorios también pueden tener síntomas de obstrucción de las vías respiratorias superiores, enfermedades cardíacas congénitas y reflujo gastrointestinal (Frazier & Friedman, 1996).
Es común que los bebés con síndrome de Down tengan una boca pequeña y el cráneo tiende a ser más corto y más ancho que en un típico niño (braquicefalia). El puente nasal es plano y los pliegues epicánticos están presentes (Hall, 1966).
El rechazo de la comida es frecuente en los niños y no siempre progresan en una secuencia típica con las texturas de los alimentos como los demás niños (Spender, et al., 1996).
Esto puede ser debido a los síntomas que acompañan el síndrome de Down tales como hipotonía, macroglosia y la una cavidad oral pequeña, disfunción motora oral que puede ser debida a problemas dentales, y un retraso en el desarrollo y cognitivo general (Spender, et al., 1996).
Los factores personales como la vida familiar del niño y las características personales también son válidas, (OMS, 1980).
Algunas de las funciones motoras, como la protrusión de la lengua, serán más deteriorada que otros. Protrusión de la lengua puede ser causada por hipotonía, el tamaño de la cavidad oral y la reducción de la longitud del paladar (Spender, et al., 1996).
Sin embargo, la hipotonía puede afectar a la musculatura faríngea de los niños con síndrome de Down que se traducirá en la aspiración. La hipotonía también puede causar una succión no coordinada y otra dar lugar a la aspiración (Frazier & Friedman 1996). La hipotonicidad generalmente disminuye con la edad, por lo que la aspiración del niño puede ser menos severa a medida que crecen (Frazier & Friedman, 1996).
Tabla 1.
Presentación física de los recién nacidos con síndrome de Down (adaptado de Hall, 1966 y Sáenz, 1999)
Características neonatales de Síndrome de Down Porcentaje de la población (%) |
Perfil facial plano 90 Pobre reflejo de Moro (reflejo de sobresalto) 85 La hipotonía (bajo tono muscular) 80 Hiperflexibilidad de las articulaciones 80 El exceso de piel en la parte posterior del cuello 80 Fisuras palpebrales inclinadas 80 La displasia de la pelvis 70 Orejas de forma inusual 60 Displasia de la falange media del quinto dedo 60 Paladar ojival 59-74 Solo pliegue palmar transversal 45 Sobresaliendo lengua secundaria a pequeña, paladar estrecho 32-89 Cardiopatía congénita 40 – 50 |
La importancia del enfoque integral:
La evaluación y el tratamiento de la alimentación / deglución deben seguir las directrices de la Clasificación Internacional del Funcionamiento, la Discapacidad y la Salud (World Health Organization, 1980).
Los ambientes del hogar y de la escuela en la que el niño participa, habilidades de auto-alimentación, la aceptación de los alimentos y las limitaciones que rodean la hora de comer, así como las deficiencias específicas subyacentes que contribuyen a la alimentación y deglución deben ser tenidas en cuenta.
Este enfoque integral debe ser la base para la planificación de la evaluación y el tratamiento. Es esencial considerar la manera de promover una experiencia con las comidas que sea funcional y efectiva para los niños con síndrome de Down y sus familias en lugar de centrarse exclusivamente en el diagnóstico de los problemas (Arvedson y Brodsky, 2002).
Por lo tanto, el enfoque centrado en la familia es todavía más importante en el campo de la disfagia. Es importante reconocer y respetar este punto de vista cultural, con el fin de trabajar en colaboración con la familia.
Conocimiento Requerido
Cuando se trabaja con niños de Síndrome de Down que padecen disfagia, debe tener conocimiento de: