¿Es posible prevenir el fracaso escolar desde la cuna? Parte II

6. Dar la oportunidad de moverse en el espacio libremente, especialmente en la primera infancia, comenzando desde los primeros meses de vida. (Así el niño tendrá un adecuado conocimiento espacial y temporal, imprescindibles para desarrollar las futuras competencias escolares).

EspacioLogopedico.com | 1/02/2009

5. Establecer tiempos de tertulia con el niño y contestar a todas sus preguntas. Utilizar el factor sorpresa para despertar su curiosidad. (Así fomentamos en el niño su afán por saber).

6. Dar la oportunidad de moverse en el espacio libremente, especialmente en la primera infancia, comenzando desde los primeros meses de vida. (Así el niño tendrá un adecuado conocimiento espacial y temporal, imprescindibles para desarrollar las futuras competencias escolares).

7. Jugar todos los días al menos 30 minutos con el niño sin imponer o dirigir su juego y manifestando que nos parece genial lo que eligió. El resto del día en la vida cotidiana se utilizarán los límites. Fomentar su creatividad, jugando con cajas, telas… en lugar de juguetes ya hechos. (Así fomentamos en el niño su automotivación: querer hacer, aprender,…). Evitar atosigar al niño con juguetes para compensar la posible ausencia de los padres.

8. Aceptar plenamente al niño. Una amorosa valoración paterna sin descalificaciones. (Así favorecemos una autoestima positiva).

9. Permitir al niño momentos de alegría, de tristeza y de enojo sin intentar que renuncie a la propiedad de sus experiencias personales internas; sin enfadarnos cuando sus emociones no se adaptan a las nuestras. (Así el niño aprenderá a canalizar de forma positiva sus propias emociones)

Por último, destacar la importancia del desarrollo de una inteligencia integrada, para prevenir el fracaso escolar.
Tener datos acumulados en la memoria, no necesariamente significa ser inteligente.
La inteligencia es saber pensar, pero también tener ganas y decisión para hacerlo.