Los jóvenes hablaron primero de un momento en su vida en el que se definieron como hijos de familia y alumnos que tenían que asumir la escuela como una obligación, y después hablaron de otro momento en el que estaba en juego la elaboración de sus posturas personales ante la vida que querían continuar.
Los jóvenes hablaron primero de un momento en su vida en el que se definieron como hijos de familia y alumnos que tenían que asumir la escuela como una obligación, y después hablaron de otro momento en el que estaba en juego la elaboración de sus posturas personales ante la vida que querían continuar. Los modelos culturales que recuperaron y a los que les dieron cuerpo para describir sus experiencias de la época en que dejaron la escuela, les ayudaron a reivindicar formas de ser como personas valiosas fuera de la escuela, pero sobre todo a justificar las elecciones que hicieron o el rumbo que tomaron sus vidas. Así, dejaron de legitimar la escuela al compararla con formas de vida que consideraban más valiosas para ellos (como el matrimonio), o porque obtenían recursos materiales (como el dinero) y culturales (como el prestigio social) en otros contextos sociales.
Ahora que son adultos, seis de los diez jóvenes están casados y tienen hijos. Los que trabajan se ubican en empleos como choferes, obreros, empleados en empresas, o realizando servicios a domicilio, y en general comentaron que no tenían un buen salario. Tres de los diez dijeron sentirse a gusto con lo que hicieron en sus vidas, mientras que los siete restantes expresaron arrepentimiento por no haber continuado estudiando. Aidée, por ejemplo, dijo: "Ahora ya pienso distinto, yo creo por la situación, que ve uno que no alcanza el dinero y que uno estaría mejor estudiando que estar cuidando niños o estar así casada. Mejor estudiando que estar aquí en la casa.". Sin embargo, ya veían difícil volver a estudiar y se resignaban con lo que habían obtenido. Ahora pensaban que como padres de familia les tocaría tratar de convencer a sus hijos de no desertar de la escuela.