ANA MARÍA DONATE EXPÓSITO, VOCAL EN GRANADA DEL COLEGIO OFICIAL DE LOGOPEDAS DE ANDALUCÍA
El inicio de la pandemia, unido a la dificultad de encontrar material sanitario y de protección necesario para realizar nuestro trabajo, hizo que muchos logopedas se vieran en la obligación de cerrar sus centros, al menos de forma temporal, sobre todo para velar por la salud de sus pacientes y trabajadores.
"Esta situación ha supuesto un punto de inflexión en la que ha sido necesario hacer una serie de adaptaciones y de adquirir nuevos aprendizajes, tanto por parte del profesional como de las familias, para poder continuar acogiendo a nuestros pacientes", explica Ana María Donate Expósito, vocal del Colegio Oficial de Logopedas en Andalucía.
–Al ser una rama sanitaria deberían seguir ejerciendo a pesar de todos los impedimentos, ¿no?
–Cierto, pero había presentes una serie de dificultades que impedían poder ejercer la logopedia de forma segura, tanto para el paciente como para el profesional. Hay que tener en cuenta que nosotros, muy frecuentemente, estamos en contacto con las mucosas del paciente y siempre no podemos mantener la distancia de seguridad tan necesaria para poder poner freno al virus; por eso, inicialmente fue necesario el cierre. Ha sido una situación de impotencia el saber que parar nuestro servicio no sería beneficioso para nuestros pacientes, pero ante todo debe primar la seguridad.
–¿Es la logopedia online una solución?
–La logopedia online ha sido, es y seguirá siendo un reto diario con el que tenemos que lidiar para intentar mantener una armonía en esta situación particular que nos está tocando vivir. Es una forma de mantener la cercanía con el paciente, realizar un trabajo conjunto con la familia de orientación y asesoramiento y, sobre todo, que el propio paciente pueda continuar con su tratamiento.
Sin embargo, hay casos complejos en los que es esencial que el logopeda esté de forma presencial trabajando con el paciente, ya que hay técnicas que son imprescindibles realizarlas con supervisión del profesional. Por eso es fundamental realizar una valoración específica de cada uno de los casos . Los hay, por ejemplo, en los que es necesario realizar una palpación, comprobar si el ápice lingual está bien posicionado; casos en los que es necesario trabajar la atención conjunta, realizar una estimulación temprana, percibir comunicación no verbal, etc. Ante todos estos ejemplos, nos resulta difícil realizar una intervención online, porque para nosotros es muy importante y nos aporta muchísima información, el contacto directo con el paciente, algo que la pantalla nos impide.
–Las secuelas de la Covid-19 pueden ser a nivel muscular y neuronal, afectando a la comunicación en el paciente, ¿En qué patologías puede intervenir el logopeda?
–Al inicio de la pandemia, los problemas respiratorios, eran la única consecuencia conocida tras haber pasado la Covid-19. Pero, conforme se ha ido avanzando en el estudio del SARS-COV-2, se han descubierto nuevas secuelas en los pacientes tras recibir el alta: accidentes cerebrovasculares, alteraciones sensitivas y motoras que comprometen la función oral del paciente, alteraciones vocales debidas a traumas en las mucosas provocados por intubaciones prolongadas, disfagia (alteración en la deglución) producidas en pacientes post UCI, comprometiendo la seguridad y la alimentación del paciente, ya que puede provocar deshidratación, infecciones respiratorias, neumonías aspirativas, etc. En estos ejemplos es fundamental la presencia del logopeda para su correcta recuperación; de hecho, nuestro papel es esencial y determinante en la recuperación de los síntomas de la Covid-19, ya que somos profesionales sanitarios preparados y capacitados para rehabilitar las alteraciones consecuentes del virus, ayudando a mejorar la calidad de vida e intentando que el paciente pueda volver a una vida lo más normalizada posible.
Granada Hoy
2/01/2021