Personajes históricos como Edison o Einstein sufrieron dislexia. Sin embargo, fueron personas creativas, con una inteligencia visual muy desarrollada. Los últimos estudios indican que la dislexia y otros problemas de aprendizaje tienen su origen en el desarrollo de la inteligencia visual sobre la verbal, lo que repercute en una necesidad de asimilar conceptos a través de imágenes. Un hecho que afecta a una cuarta parte de la población en edad escolar, y que, de no tratarse adecuadamente, puede derivar en dislexia y otras dificultades de aprendizaje, compresión o falta de atención; incluso en fracaso escolar.
-¿Qué aporta el nuevo método de tratamiento de la dislexia con respecto a lo que se estaba haciendo hasta ahora?
-Tradicionalmente no teníamos claras las causas y trabajábamos bajo hipótesis. Abordábamos tres aspectos: neurológico, psicomotriz y de nociones espacio-temporales. Ahora, en cambio, al situar la causa en el predominio de la inteligencia visual, enseñamos a los niños a dar imagen a conceptos abstractos que les resultan confusos, como los determinantes o las preposiciones, por ejemplo.
-¿Qué síntomas presenta un niño con dislexia o dificultades de aprendizaje?
-Son niños que por lo general presentan un nivel de lectura, escritura o cálculo inadecuado para su edad. En ocasiones, distorsionan, omiten, repiten o sustituyen letras o números. Pero además, tarda en hacer los deberes, parece vago o poco inteligente, sin serlo, realmente. Son niños imaginativos, con habilidad para tareas como la mecánica, dibujo, manualidades... que aprenden más manipulando que estudiando textos. También pueden presentar síntomas físicos como picor de ojos y dolor de cabeza o estómago, debido al esfuerzo intelectual al que se ven sometidos en las tareas escolares.
-Si necesitan información visual para afianzar conocimientos, ¿es recomendable el uso del ordenador y las nuevas tecnologías como herramienta de aprendizaje?
-Sí, desde luego. De hecho, estos niños son muy hábiles en el uso de ordenador y en temas de informática, por lo que puede ser una herramienta de apoyo en el estudio, pero nunca se solucionará el problema hasta que domine la lectoescritura.
-¿Se llega a corregir definitivamente la dislexia?
-Conseguir que un niño lea correctamente es sencillo, cuando se detecta a tiempo. Lo importante en nuestro trabajo es ayudar no sólo a quien padece dislexia, sino a los que sufren serios problemas de aprendizaje.
La nueva España
30/11/2005