El té puede proteger contra la enfermedad de Alzheimer, aunque no sea una cura para este mal que deteriora el cerebro, dijeron el martes científicos británicos.
Científicos de la Universidad de Newcastle dijeron que su investigación demuestra que al menos una taza regular de té al día puede retrasar el desarrollo de la enfermedad que nubla la memoria.
"Aunque no existe cura para la enfermedad de Alzheimer, el té podría ser otra arma en el arsenal para tratar este mal y retardar su desarrollo", dijo el investigador Ed Okello.
Los investigadores hallaron que tanto el té negro como el verde inhiben la actividad de enzimas vinculadas al desarrollo de la enfermedad de Alzheimer. Sin embargo, también detectaron que el café no tiene propiedades significativas contra el trastorno.
Alrededor de un millón de personas mueren anualmente por causas relacionadas con esta enfermedad. No hay una explicación médica definitiva que indique por qué afecta a los seres humanos.
Resultados de pruebas de laboratorios, realizadas por el equipo de investigación, revelaron que el té negro y el verde inhiben la actividad de la enzima acetilcolinesterasa, que degrada el neurotransmisor acetilcolina.
La enfermedad de Alzheimer se caracteriza por una disminución de acetilcolina.
Los científicos dijeron que tanto el té negro como el verde también inhiben la actividad de la enzima butiricolinesterasa, que se ha descubierto en depósitos de proteínas en el cerebro de pacientes con Alzheimer.
EL TE VERDE RESULTO MEJOR
Sin embargo, el té verde resultó más eficaz en varias pruebas clínicas y tuvo efectos más duraderos, según la investigación publicada el martes en la revista Phytotherapy Research.
"Nuestros hallazgos son muy interesantes, ya que el té es una bebida muy popular, barata y su consumo no parece tener afectos adversos. No obstante, consideramos que pasarán varios años antes de que produzcamos algo a nivel comercial", dijo Okello.
Los investigadores dijeron que el próximo paso es hallar cuáles son exactamente los componentes en el té verde que inhiben la actividad de estas enzimas.
La Universidad de Newcastle está buscando fondos para realizar nuevos estudios con el té verde.
Su objetivo es lograr un té de grado farmacéutico que pueda servir de tratamiento a los pacientes con la enfermedad de Alzheimer.*.
Reuters
16/11/2004