Las mujeres, y sobre todo aquellas que trabajan como docentes o estudian para serlo, fueron mayoría en un estudio de voz realizado recientemente en La Plata en el que se detectaron disfonías y distintos trastornos asociados.
Los exámenes se hicieron durante el último Día Mundial de la Voz, que se celebra el 16 de abril, jornada en la que se realizan evaluaciones gratuitas por parte de profesionales en distintas ciudades del mundo a quienes se acercan voluntariamente a consultar, como una forma de crear conciencia sobre la necesidad de hacerse exámenes periódicos.
En La Plata las evaluaciones estuvieron a cargo de profesionales del Colegio de Fonoaudiólogos y de Fonoar (Centro Fonoaudiológico Integral), otorrinolaringólogos y licenciados en fonoaudiología que dividieron la evaluación en dos pasos.
El primero, a cargo de los otorrinolaringólogos, consistió en una evaluación laringológica utilizando técnicas de laringoscopía indirecta que permite ver el estado de las cuerdas vocales. En esta etapa no se detectó patología en más de la mitad de los casos y se observaron afecciones como hipertonía supraglótica, hipotonía cordal y nódulos de cuerdas vocales en algunos pacientes puntuales.
Seguidamente, los licenciados en fonoaudiología realizaron una evaluación perceptual utilizando una escala de uso mundial que detecta características presentes en la disfonía, como la ronquera, la aspereza, el soplo, la tensión y la inestabilidad, relacionada con el estado de la fuente glótica.
Según explicó Gabriela Castelli, directora de Fonoar, las características más detectadas en los casos estudiados fueron la ronquera y la aspereza, mientras la astenia y la inestabilidad fueron menos frecuentes. Los resultados del estudio perceptual coincidieron en todos los casos con los del examen laringeo.
"DISFONIAS DE LARGA DATA"
María Viti, de la Sociedad Argentina de la Voz, tuvo a su cargo la coordinación de la actividad en la Argentina, a través de la cual se evaluó la voz de más de un millar de personas en todo el país. La mayoría mujeres. La mayoría docentes.
El estudio se realizó por primera vez en La Plata -en Buenos Aires se concreta desde hace seis años- y convocó en la Ciudad a una mayoría de docentes y estudiantes de carreras docentes. En total, el 53% de los que se acercaron voluntariamente para evaluarse estaban comprendidos en alguno de estos dos grupos.
Así, fueron docentes el 26% de los evaluados, estudiantes de carreras docentes el 27%, cantantes el 20%, amas de casa el 5%. En tanto, el 22% de los examinados se dedican a ocupaciones diversas.
"Si bien es natural que la gente que hace de su voz una herramienta de trabajo sea la que más se acerca a examinarse, es llamativo el gran número de docentes que se acerca a la consulta. Muchas de estas maestras y profesoras llegan a la consulta cargando con disfonías de larga data y con la voz en muy mal estado. Se dan casos, incluso, de docentes que llegan a examinarse después de más de un año de mantener una disfonía crónica", dice Viti, quien agrega que otros de los motivos que las empujan a realizarse el estudio son las molestias para hablar, el dolor de garganta o la picazón de garganta al leer en voz alta.
Del mismo modo, la muestra tomada en la Plata -y también la que se efectúa en el resto del país- evidencia que las que más consultan son las mujeres, que en nuestra ciudad fueron el 71% de las examinadas.
Según Viti, "uno de los objetivos que tiene la actividad es convocar a los fumadores, pero no es tan fácil de lograr y año a año es escaso el número de fumadores que se acercan".
Según los profesionales, lo recomendable es que este tipo de evaluación de realice una vez al año, sobre todo en los considerados más expuestos que son quienes trabajan con la voz (docentes, vendedores, cantantes, actores, locutores) y los fumadores.
ANUALES
Según los especialistas, los fumadores y los que trabajan con la voz deberían examinarse una vez por año
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7/06/2008