Escuchar música unas horas al día puede ayudar a los pacientes de accidente cerebrovascular a recuperarse más pronto, según investigadores finlandeses.
El estudio de 54 pacientes que habían sufrido un accidente cerebrovascular de la arteria cerebral media del hemisferio derecho o izquierdo encontró que los que escuchaban música unas cuantas horas al día mostraban más mejoras en la memoria verbal y la atención enfocada, y tenían un estado de ánimo más positivo que los que escuchaban libros en audio o no escuchaban nada.
El estudio, que aparece en la edición del 20 de febrero de la revista Brain, es el primero en demostrar esta relación entre escuchar música y la recuperación del accidente cerebrovascular. Los hallazgos podrían resultar útiles en la práctica clínica, afirmaron los investigadores.
“Como resultado de nuestros hallazgos, sugerimos que escuchar música a diario durante el inicio de la recuperación tras un accidente cerebrovascular ofrece una valiosa adición a la atención del paciente, sobre todo si otras formas activas de rehabilitación aún no son factibles en esa etapa, al proveer un medio individualmente adaptado, fácil de llevar a cabo y poco costoso de facilitar la recuperación cognitiva y emocional”, afirmó en una declaración preparada el primer autor del estudio Teppo Sarkamo, de la Universidad de Helsinki y el Instituto Cerebral de Helsinki.
El periodo de dos meses de musicoterapia comenzó tan pronto como se pudo tras la admisión hospitalaria de los pacientes de accidente cerebrovascular. A los pacientes, que eligieron su propia música, se les siguió y evaluó durante hasta seis meses tras el accidente cerebrovascular.
“Encontramos que tres meses tras un accidente cerebrovascular la memoria verbal mejoró respecto a la primera semana posterior a la afección en 60% en los que escuchaban música, en 18% en los que escuchaban libros en audio, y el 29% entre los que no escuchaban nada”, dijo Sarkamo, “de manera similar, la atención enfocada, es decir, la capacidad para controlar y realizar operaciones mentales y resolver conflictos entre las respuestas, mejoró en 17% entre los que escuchaban música, pero no hubo mejora entre los que escuchaban libros en audio o nada.
Estas diferencias seguían esencialmente iguales seis meses tras el accidente cerebrovascular”.
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15/03/2008