Este síndrome no sólo dificulta la pronunciación de ciertas palabras, sino que también pueden mermar las interacciones sociales, pues las personas pueden ser blanco de burlas.
El síndrome de Ascher es una rara afectación benigna de etiología desconocida. Los signos son:
Cuando la deformidad labial interviene con la masticación el tratamiento quirúrgico está indicado, igual que en los casos en los que el volumen de los labios y, o párpados son de tal magnitud que provocan alteraciones estéticas o funcionales severas.
Se presenta con mayor frecuencia en el labio superior, pero también puede presentarse en el labio inferior.
Las anomalías en labios y párpados se desarrollan más o menos en forma simultánea y abrupta, haciéndose más evidente en la edad adulta. La blefarocalasia puede presentarse con más o menos volumen con respecto al agrandamiento observable en el doble labio.
Este síndrome no sólo dificulta la pronunciación de ciertas palabras, sino que también pueden mermar las interacciones sociales, pues las personas pueden ser blanco de burlas.
Existen pocas referencias relacionadas con el tratamiento, las complicaciones y resultados a largo plazo.
En 1909 Laffler fue el primero en reportar un caso de labio doble con blefarocalasia, y es en 1920 que Ascher completa en cuadro descrito por Laffler agregándole la hipertrofia tiroidea; esta tríada es lo que hoy se conoce como Síndrome de Ascher, aunque la hipertrofia tiroidea no es una constante para el diagnóstico del síndrome.
La mayoría de los casos se presenta en la pubertad, por lo que se piensa que una de las causas podría ser trastornos hormonales, aunque no se sabe a ciencia cierta por qué surge.
Existen diversas técnicas quirúrgicas para corregir el doble labio.