La disfagia (dificultad para deglutir alimentos) puede provocar malnutrición, infecciones respiratorias e incluso la muerte. En España la sufren dos millones de personas. Sin embargo, muchos pacientes no están diagnosticados. Aquí, la inteligencia artificial puede ser de gran ayuda como ya ocurre en el diagnóstico de la epilepsia. El Hospital de Mataró ha desarrollado un algoritmo de cribado, que en pocos segundos identifica los pacientes con alta probabilidad de sufrirla.
Ya la han desplegado en el Hospital de Palamós y en los próximos años llegará a otros centros. Alberto Martín Martínez, enfermero investigador de motilidad digestiva del centro, explica la precisión de la herramienta para hacer frente a un serio problema asistencial: sólo un 20% de las personas con disfagia son diagnosticadas.
Pregunta: ¿Qué es la disfagia?
Respuesta: Son los problemas que puede tener una persona para tragar. Fruto de ellos los alimentos en vez de llegar al estómago pueden ir al pulmón, que sólo debe recibir aire. Si esto ocurre, causa infecciones respiratorias. Una de las grandes complicaciones de la disfagia es la malnutrición, ya que la gente no digiere todo lo que debe. También lo son las infecciones respiratorias, que en muchos casos derivan en la muerte del paciente,
P: ¿ A quién afecta?
R: El 50% de los pacientes mayores de 70 años, ingresados por cualquier motivo, tienen esta patología. Hay unos 30 millones de personas en Europa y se estima que en 2050 sean 120 millones.
P: ¿En qué consiste la herramienta?
R: El diagnóstico de disfagia se realiza con un algoritmo muy bien definido. Consiste primero en un cribado, que detecta cuáles son los pacientes en riesgo para después hacer una evaluación clínica y, si es necesario, una evaluación instrumental. Las herramientas de cribado se basan en cuestionarios y entrevistas. Funcionan muy bien pero son muy lentas y no pueden pasar por el cribado todo el volumen de personas que sufre disfagia. Este es el problema que queremos solucionar.
La herramienta AIMS-OD funciona sin necesidad de que el sanitario haga alguna acción. En el momento que el paciente ingresa o viene a tu consulta, el programa coge toda la información de su historial clínico y la procesa y te muestra el riesgo del paciente de tener disfagia. Así, las personas que tienen un riesgo alto no tienen que pasar por el cribado, sino que pasan directamente al diagnóstico clínico.
P: ¿Vais a diagnosticar a más pacientes con el programa?
R: Sí, esta es la hipótesis. Si ahora se estima que un15-20% de los pacientes con disfagia están diagnosticados mientras que esta herramienta te permita cribar el 100% de las personas hospitalizadas. Además, lo hace con un 30% más de precisión. Por ejemplo, este hospital tiene alrededor de 500 camas. Una enfermera experta tardaría hasta 80 horas en cribar a estos pacientes mientras que la herramienta lo hace en seis segundos. De esta manera lo hacemos en tiempo real. Podemos llegar con más precisión, de forma más rápida y automática.
Nius
21/02/2023