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Dos estudios del MIT confirman, en una etapa inicial de investigación, la seguridad y tolerancia de la administración de un tratamiento no invasivo de luz y sonido de 40 Hz para la enfermedad de Alzheimer
Existen más de 55 millones de personas con demencia en todo el mundo, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), y se realiza un nuevo diagnóstico cada tres segundos, según la Confederación Española de Alzheimer (CEAFA). A esto se suma que, según la estimación de los expertos, para 2050 los casos las enfermedades neurodegenerativas se triplicarán en todo el mundo. La demencia, y la enfermedad de Alzheimer que es el tipo de deterioro cognitivo más común, son un reto para los sistemas sanitarios al que diferentes investigadores intentan dar respuesta.
Actualmente el alzhéimer no tiene cura, pero diferentes estudios han buscado la forma de tratarla o de mitigar su avance. A mediados de 2022, un equipo del CSIC, la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) y la Universidad de Columbia (EE.UU.) desarrollaron un holograma acústico impreso en 3D que facilita la administración de fármacos directamente a las zonas afectadas del cerebro. Ahora, los primeros resultados de unos estudios del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) señalan que un tratamiento no invasivo de luz y sonido de 40 hercios (Hz), frecuencia Gamma, es seguro y puede suponer un beneficio para esta patología
Los resultados de la estimulación sensorial de frecuencia gamma en pacientes con alzhéimer leve han sido publicados en la revista ‘Plos One’ y la convierten en un potencial nuevo tratamiento modificador de la enfermedad, explican los autores. Lo confirmarán los ensayos clínicos que se realizarán próximamente, pero por el momento los datos actuales llaman a la esperanza.
ESTIMULACIÓN POR FRECUENCIA GAMMA: SEGURA Y BIEN TOLERADA
El cerebro cuenta con cinco tipo de ondas, que ordenadas de una mayor amplitud a una menor son: delta (1 a 3 Hz), relacionada con el sueño profundo; theta (3,5 a 8 Hz), asociada a la imaginación, la calma y la reflexión; alpha (8 z 12 Hz), ayuda a la calma mental y al aprendizaje, también a mantener un equilibrio entre el mundo interior y el exterior; beta (12 a 35 Hz), implicado en actividades mentales como ordenar una tarea o estar alerta; y gamma (más de 30 Hz), en momentos que se requiere mucha atención
En los últimos años se ha visto que las ondas gamma se reducen en los cerebros de las personas con alzhéimer. Idea de la que partieron ya en 2017 un grupo de investigadores del MIT para demostrar que las altas actividades de ondas gamma en el cerebro ayudan a combatir la formación de placas de beta-amiloides, características de esta patología. En ese momento se mostró eficaz en ratones, y se ha seguido investigando.
Ahora otro equipo del MIT ha demostrado que una terapia con estimulación visual y auditiva de frecuencia gamma es segura y tolerada, la GENUS de 40 Hz. "En estos estudios clínicos, nos complació ver que los voluntarios no experimentaron ningún problema de seguridad y usaron nuestros dispositivos experimentales de luz y sonido en sus hogares de manera constante", dice Li-Huei Tsai, profesor de Picower en el Instituto Picower para el Aprendizaje y la Memoria en el MIT.
Se trata de dos estudios que parten de los anteriores realizados en ratones por el instituto americano. Esta vez se evaluaron los efectos secundarios en los pacientes humanos, constatando que el efecto adverso más común fue “sentirse dormido o somnoliento”, no dándose eventos adversos graves. Además, los pacientes que recibieron el tratamiento no sufrieron signos llamativos de atrofia cerebral que responde a la progresión de la enfermedad, y exhibieron una mejor conectividad entre las regiones del cerebro involucradas en el modo predeterminado del cerebro y las redes visuales, relacionadas con la cognición y el procesamiento visual.
“Si bien también nos alienta ver algunos efectos positivos significativos en el cerebro y el comportamiento, los estamos interpretando con cautela, dado el pequeño tamaño de la muestra y la breve duración de nuestro estudio. Estos resultados no son evidencia suficiente de eficacia, pero creemos que claramente respaldan el proceder con un estudio más extenso de la estimulación sensorial de 40 hercios como una posible terapia no invasiva para la enfermedad de Alzheimer", indica Tsai.
Con Salud
5/02/2023