Un equipo de cinco investigadores de la Universidad de Burgos forma parte de un proyecto europeo para estudiar la aplicación de tecnologías de realidad virtual y realidad aumentada con el fin de ayudar a la inclusión educativa de niños con dislexia, ha informado a Efe el director del equipo, Víctor Abella.

La dislexia es una alteración de la capacidad de leer por la que se confunde o se altera el orden de letras, sílabas o palabras y lo que se pretende con este estudio, incluido en el programa europeo 'Erasmus+', es apoyar el aprendizaje en un entorno "más seguro".

"Los niños trabajan con modos virtuales de realidad lo más próximos posible a la realidad para que luego les sea más fácil la integración en el entorno real de las aulas", ha explicado Abella.

Hasta ahora, el apoyo que reciben habitualmente los niños que padecen dislexia es una carga de trabajo añadido para realizar en casa, pero basado en métodos tradicionales.

Los investigadores creen que el uso de la realidad aumentada y la realidad virtual creará un entorno más parecido a las aulas y que los niños pueden ver como asimilado al juego, lo que hará menos penosa esa preparación para igualar sus oportunidades.

En el estudio, que se desarrollará durante tres años, además de la Universidad de Burgos participan otros dos equipos de investigación españoles, junto a uno de Rumanía y otro de Italia.

Una empresa salmantina será la encargada de suministrar el material tecnológico necesario para realizar el estudio

La Vanguardia
12/10/2018