Los investigadores están descubriendo nuevas conexiones entre el cerebro y el intestino que podrían marcar la diferencia en la vida cotidiana de los niños con autismo y sus familias.
Una neurocientífica de oficio, la Dra. Elisa Hill-Yardin nunca esperó encontrarse concentrada en el intestino. Pero su investigación pionera sobre el ‘cerebro intestinal’ nos está ayudando a comprender mejor sus vínculos críticos con trastornos neurológicos como el autismo y la enfermedad de Parkinson.
No es solo el desafío científico lo que impulsa su trabajo: como madre de un hijo con autismo severo, la apasionada búsqueda de descubrimientos de Hill-Yardin en este campo emergente tiene una ventaja personal.
El ARC Future Fellow y líder del equipo Gut-Brain Axis en la Facultad de Salud y Ciencias Biomédicas de RMIT explica cómo el cerebro en nuestras entrañas afecta el cerebro en nuestras cabezas.
¿Qué es el “cerebro intestinal”?
El sistema nervioso entérico, o el cerebro del intestino, controla las contracciones del intestino y sus secreciones.
Es un gran sistema nervioso, aproximadamente del mismo tamaño que la médula espinal. Muchas de las mismas neuronas que se encuentran en el cerebro también se pueden encontrar en el cerebro intestinal.
La Dra. Elisa Hill-Yardin presenta su investigación sobre genes, metabolitos y circuitos neuronaleseste mes en la reunión de la Sociedad de Asia y el Pacífico para Neuroquímica en Macao (27-29 de agosto).
Como investigadora principal de ARC Future Fellow y Vicerrector, dirige el Hill-Yardin Lab en el campus de Bundoora de RMIT y es también fundadora y presidenta de Frontiers in Neurodevelopmental Disorders (FiND), que tiene como objetivo promover la conciencia y compartir las últimas investigaciones locales e internacionales con médicos, educadores, investigadores y familias.
El equipo de Gut-Brain Axis, con miembros basados en RMIT y la Universidad de Melbourne, trabajan para comprender el papel del sistema nervioso entérico del intestino y cómo interactúa con el cerebro y los microbios en nuestro tracto gastrointestinal para influir en el estado de ánimo y el comportamiento.
Acust
11/10/2018