No hay plazo que no se cumpla. Quedan pocos días para el término de febrero y ya muchas familias se preparan para la entrada a clases comprando los uniformes y útiles.

Para las madres de niños pequeños esta se transforma en una época estresante, especialmente si su hijo ingresa por primera vez al sistema escolar.

Katherine Dinamarca, académica de la Escuela de Fonoaudiología de la Universidad Andrés Bello, dice que lo mejor es no crear expectativas en el niño: “Solo terminaremos transmitiéndole nuestras propias aprehensiones. Si el pequeño observa que el proceso previo a entrar al jardín o al colegio es un momento especial, libre de estrés y lleno de alegría, enfrentará esta nueva etapa como algo natural”, señala.

La fonoaudióloga recomienda que escolarizar tempranamente a los hijos les beneficia en muchos aspectos, especialmente en los ámbitos emocional y lingüístico.

“La experiencia de estar con otros niños de su edad les ayuda a desarrollar su lenguaje de una forma exponencial. Los primeros años de un niño son cruciales para el desarrollo de habilidades que potenciarán su inteligencia. En pocos meses, los padres se darán cuenta del enorme desarrollo que ha alcanzado su hijo”, comenta.

Es importante que en este proceso el niño sienta que los padres participan activamente de todo el proceso.

“Buscar el uniforme, los útiles, la mochila son actividades que puedes realizar junto al pequeño y que le otorgarán confianza en el nuevo proceso que enfrentará”, añade.

DIÁLOGO LÚDICO

La especialista además sugiere intentar dialogar con el niño respecto al jardín o colegio donde estudiará, pero de una forma lúdica y espontánea para que lo perciban como algo entretenido.

“No le hable de experiencias negativas que podría sufrir o que vivió usted, pues solo lo atemorizará. Si bien es cierto advertir a los niños sobre algunos aspectos de los cuales deben cuidarse, debe hacerlo en otro momento, una vez que el niño ya se haya adaptado”, apunta.

Aconseja a los padres que se concentren en disfrutar esta etapa de preparación, pues es la más significativa por tratarse de la primera vez.

“Haga que para su hijo y familia sean un momento inolvidable. Con esto generará confianza y el proceso de adaptación será más fácil para todos porque cuando vea que su hijo se va contento al jardín o colegio, será señal que todo anda bien”, remarca

La nación Chile
28/02/2017