La disfonía infantil es una alteración en la calidad de la voz debido a un trastorno orgánico (resfriado) o un sobreesfuerzo vocal (hablar alto o gritar) llevando a que la voz quede ronca.
El sobre esfuerzo vocal es la causa más común, produciendo un cambio en el tono de la voz del niño, haciéndola más ronca. Al principio, la ronquera puede durar algunos días y seguidamente la voz se recupera. No obstante, si el esfuerzo persiste, las disfonías se convierten en algo más frecuente, perjudicando la producción vocal.
Aún cuando la voz está ronca por muchas semanas, normalmente no se considera como un motivo suficiente para acudir al médico pediatra o a un otorrinolaringólogo. Los padres se acostumbran a la voz ronca de su hijo y no la ven como una voz alterada. Por otra parte, el niño no valora como negativa su voz y no la identifica como una voz alterada.
¿Cuáles son los factores causales y predisponentes?
Las principales causas de las disfonías adquiridas en la infancia son las alteraciones en el comportamiento vocal por abuso y mal uso de la voz: gritar demasiado, continuar hablando después de abuso vocal, gritar para llamar la atención, entre otros.
Existen también otros factores predisponentes como, el estado emocional y perfil psicológico del niño. Por ejemplo, niños intensos, muy nerviosos o ansiosos que tienden a gritar mucho, modelos vocales o articulatorios inadecuados en la familia o colegio y mal uso de reglas de comunicación interpersonal. Para favorecer la producción de la voz, es importante respetar turnos, utilizar una intensidad adecuada de la voz para el ambiente, uso de pausas respiratorias, así como monitoreo de obstrucciones en las vías aéreas superiores o tensión músculo esquelética.
¿Cuáles son los principales síntomas de disfonía infantil?
• Se percibe habla con tensión (se pueden ver las venitas del cuello que sobresalen).
• La voz cambia o casi no se oye después de un uso intenso.
• Hay , cansancio al hablar, presencia de dolor, pérdida de la voz, incoordinación entre la respiración y el habla
• No pueden sostener notas agudas en el canto.
¿Cómo pueden ayudar los padres?
Si usted sospecha que su niño o niña presenta alguno de los síntomas mencionados, acuda a un otorrinolaringólogo para una evaluación de sus pliegues vocales denominada videolaringoscopia. La alteración más común en la infancia son los nódulos vocales.
Consulte también, con un especialista en voz, que evalúe funcionalmente su producción vocal, para que inicie un trabajo de rehabilitación vocal y así cambiar el patrón de voz inadecuado.
Publimetro
27/05/2016