Desde el vientre materno el niño aprehende a través de los sonidos. A medida que crece, fortalece y madura su cerebro a través del aprendizaje del lenguaje. La hipoacusia infantil no diagnosticada y tratada a tiempo produce un retraso madurativo en el niño.
Entrevistamos a la licenciada en Fonoaudiología y Terapia del Lenguaje, Luisina Gutiérrez, del equipo de profesionales de Sentir, para conocer más sobre la detección y tratamiento de esta problemática.
¿Qué estudios deben realizarse a nuestros hijos para determinar en forma temprana una posible hipoacusia?
A todos los recién nacidos se les hace un estudio llamado “otoemisiones acústicas” (OEA), obligatorio y gratuito para todo neonatal. Esta primera prueba es objetiva y determina “sospechosas” hipoacusias. A partir de los resultados y la confirmación del diagnóstico, se establece un programa de seguimiento y se realizan las derivaciones para el tratamiento médico, quirúrgico y /o audioprotésico que se precise. Cuando el niño va a ingresar a salita de 4 hay otro estudio obligatorio para poder escolarizarlo.
Más allá de los estudios auditivos, ¿qué otros signos deben tenerse en cuenta como señales de alarma?
Son fundamentalmente de tipo conductuales. Debemos observar si el niño habla muy fuerte, si mira la televisión a un volumen exageradamente alto, si hay que repetirle varias veces las consignas, si le cuesta localizar la fuente de sonido, si tiene déficit atencional. Otro llamado de atención, es cuando presenta retraso en el inicio y desarrollo del lenguaje, o variadas dificultades articulatorias, esto se debe a que la señal auditiva recibida no es correcta, lo que perjudica la adquisición del lenguaje.
Ante un diagnóstico positivo, ¿cuáles son las posibles ayudas?
Las prótesis que pueden utilizarse van a depender del diagnóstico. Cada disminución auditiva se relaciona con un tratamiento que corresponde a esa hipoacusia. Ya sea hipoacusia conductiva, donde la dificultad está en la conducción del sonido hasta el oído interno (prótesis: audífonos…); hipoacusia sensorioneuronal, la dificultad está en la transmisión de la señal acústica al cerebro (prótesis: implante coclear en casos severos, audífonos) o hipoacusias mixtas.
¿Cuáles son las ventajas de elegir un audífono de calidad para un niño?
Fundamentalmente en el desarrollo del lenguaje y del pensamiento, “un niño que se equipa a temprana edad recibe la estimulación necesaria para adquirir el lenguaje”. También se estimulan todas las partes del cerebro que favorecen al desarrollo de las funciones como la memoria, el análisis, la síntesis, la inteligencia. Es importante tratar la hipoacusia a la mayor brevedad posible, porque ”lo que no se estimula en el cerebro no se desarrolla correctamente”.
Sentir brinda un servicio de excelencia para mejorar el nivel de vida de las personas mediante ayudas auditivas de máxima calidad. Sus profesionales otorgan un amplio asesoramiento y un cálido trato humano en cada sesión.
Los Andes.
24/05/2016