¿Es el alzheimer hereditario? ¿Qué causa la enfermedad? ¿Cuáles son los síntomas? ¿Dónde está mejor el enfermo? Asier Lasa, experto en neurogeriatría de la Clínica de La Asunción, dará respuesta a estas y otras preguntas en la charla que ofrecerá mañana en el Topic -a las 19.00 horas- de manera gratuita. Asimismo, el doctor hablará sobre las técnicas de estimulación cognitiva, que retrasan el deterioro de la memoria hasta un año, y ofrecerá consejos sobre cómo afrontar los problemas de memoria en la vida diaria.
-¿Cuál es la realidad del alzheimer en Euskadi?
-No hay un censo establecido. Pero, teniendo en cuenta que aproximadamente un 10% de las personas mayores de 65 años de todo España padecen la enfermedad, se calcula que en Euskadi haya unos 60.000 enfermos. Las cifras pueden ser mayores, porque siempre hay una cantidad grande de personas que lo padecen pero están sin diagnosticar. En Tolosaldea hay alrededor de 1.000 enfermos de alzheimer.
«En Euskadi cerca de 60.000 personas sufren alzheimer, 1.000 de ellas en Tolosaldea»
«La estimulación cognitiva es un tratamiento no farmacológico»
-Las pérdidas de memoria en edades avanzadas pueden ser normales. ¿Cuándo hay que empezar a preocuparse?
-Hay signos muy notorios: cuando la persona se desorienta en lugares que no son del todo familiares, cuando se pierden en la calle, cuando comienzan a olvidar dónde han dejado prendas que utilizan a diario, etc. También es un síntoma el pseudo extravío de objetos, cuando el enfermo piensa que se lo han robado, pero en realidad no recuerda dónde lo ha dejado, la dificultad para expresarse, el empobrecimiento del lenguaje o que la persona pierda un poco el decoro y que su higiene personal se deteriore algo.
-¿En qué momento debe comenzar la alerta?
-Creo que nunca está de más tener una consulta médica ante la sospecha de que la memoria y otras funciones intelectuales se están empezando a perder. Porque cuanto antes se actúe con tratamientos preventivos, probablemente ahorremos tiempo y dinero.
-¿Se puede diagnosticar el alzheimer antes de que dé síntomas?
-Hay pruebas de evaluación psicológica en las que valoramos las diversas capacidades de la persona, sus rendimientos para memorizar, para definir patrones espaciales, el uso de lenguaje, tareas de concentración... Y comparamos los resultados con los normales a esa edad. En caso de que los rendimientos estén disminuidos realizamos una serie de analíticas e incluso escáneres para ver si hay cambios en el cerebro que nos indiquen que puede derivar en alzheimer.
-¿Existen tratamientos preventivos para esta enfermedad?
-Se pueden tomar una serie de medidas ante la sospecha de que una persona puede padecerla en el futuro. En primer lugar, se intenta mantener en orden los factores cardiovasculares, que están muy ligados al alzheimer, y también hay que hacer que la persona no se aísle y estimularla cognitivamente.
-¿La demencia es inherente a la edad?
-El alzheimer en personas menores de 50 años es excepcional, aunque hay casos. Es lo que llamamos el alzheimer de inicio precoz. Sospechamos que en esos pacientes pueda haber alguna alteración genética que esté provocando el problema.
-¿Con qué está relacionada la aparición del alzheimer?
-Es algo que a día de hoy no se sabe del todo. Conocemos algunos de los mecanismos que ocurren en el cerebro de quienes padecen la enfermedad, pero no su causa. Es un tema que se está investigando. Sabemos que se acumulan diferentes sustancias en el cerebro pero no sabemos por qué. Hay factores de riesgo como el estado cardiovascular de la persona, la edad y la presencia de traumatismos craneales previos.
-Pero, ¿es hereditario?
-No. Los casos hereditarios son solo un 1% del total.
-¿Cómo se diagnostica la enfermedad?
-Por descarte. Al paciente se le hacen pruebas psicológicas para ver que los rendimientos cognitivos están alterados. Y a partir de ahí realizamos todo tipo de pruebas para descartar otro tipo de demencia.
-¿En qué consisten las técnicas de estimulación cognitiva?
-Es de lo que hablaré mañana. Es un tratamiento no farmacológico que ha demostrado retrasar la evolución del alzheimer en estadios leves o en personas que, aunque no padezcan la enfermedad, podrían desarrollarla en poco tiempo. Son un conjunto de acciones dirigidas a mantener o mejorar el funcionamiento cognitivo, mediante ejercicios de memoria, percepción, atención, lenguaje... Se trabaja con fichas y lo ideal es hacer una hoja por las dos caras a diario, en el mismo lugar y a la misma hora, a poder ser, y con ejercicios físicos. Es necesario que algún familiar, normalmente suele ser el cónyuge, supervise y ayude al enfermo a realizar los ejercicios diariamente.
-¿Ofrece buenos resultados?
-En los casos que yo he tratado está dando resultados positivos y pueden igualar a los de los tratamientos farmacológicos, en lo que se refiere a retrasar el deterioro de la memoria. A los familiares se les da unas pautas para que supervisen esos ejercicios y cada dos o tres meses se evalúan los resultados en consulta.
-Para demencias más avanzadas, ¿también sirve?
-No. En casos más avanzados se aplican otro tipo de técnicas. Ya no se trata de orientar a la persona sino de validarla.
El diario Vasco.
19/05/2016