Indra y la Universitat de Lleida impulsan el desarrollo de una máquina 'humanoide' que permite la telepresencia laboral a personas con alguna discapacidad

El asistente personal robótico (APR) ya ha pasado de la mesa de diseño a la realidad. En el marco de la Cátedra Indra-Fundación Adecco de Tecnologías Accesibles, la Universitat de Lleida ha desarrollado un ‘humanoide’-robot para facilitar la telepresencia en entornos de trabajo para las personas con algún tipo de discapacidad. Parece un invento digno de aparecer en la serie televisiva Big Bang Theory pero aspira a ser una herramienta real para la integración de las personas. Sus impulsores aseguran que el APR "permite que un profesional que esté teletrabajando pueda conectarse al robot y desplazarse por la oficina para estar, ver y poder conversar con sus compañeros de trabajo y asistir a reuniones o encuentros informales".

El robot es controlable a través de un 'smartphone' o tableta mediante una aplicación con controles táctiles muy sencillos, de manera similar a la conducción remota que impulsan algunas marcas de automóviles. Está previsto que en un futuro también se pueda controlar a través de HeadMouse, ratón controlado por los movimientos de la cabeza y gestos faciales.

El controlador del robot puede moverse por la oficina con el robot, puede interactuar, ver y ser visto (a través de la pantalla). En términos de aspecto, el robot ha sido diseñado con la idea de que pueda aportar sensaciones empáticas, con estilo más Apple que clónico-industrial.

Con una autonomía técnica de seis horas en funcionamiento continuo, el APR es cuanto menos un alarde de integración de tecnologías actuales procedentes de campos tan diversos como la telefonía, visión artificial, interacción robot-máquina y redes informáticas. Aunque el robot aún no está listo para su comercialización, sí se ha probado y validado el concepto de telepresencia y sus funcionalidades y se han desarrollado pruebas de funcionamiento en condiciones reales en el entorno universitario, muy similar al de oficina.

EFE
21/11/2015