Cuando se detecta en un niño la existencia de una discapacidad intelectual o una alteración en su desarrollo, que pueda derivar posteriormente en discapacidad, es preciso ofrecerle una atención lo antes posible, que se traduzca en el futuro en mayores cotas de autonomía personal, y que en el ámbito de los servicios sociales se conoce con el nombre de Atención Temprana.

Dicha atención, que se presta a niños de entre 0 y 6 años, incluye tratamientos de logopedia, estimulación, fisioterapia, intervención psicológica, psicomotricidad y otras terapias complementarias que han de ser impartidas por especialistas. Cada caso es diferente y requiere una atención absolutamente personalizada en la que además juega un papel fundamental la familia del niño o niña con discapacidad intelectual o riesgo de desarrollarla.

Desde la vertiente preventiva y terapéutica, los expertos coinciden en señalar la necesidad de llevar a cabo programas de intervención precoces y de manera individual tanto con el niño como con su familia. Estos programas deben adecuarse a la problemática detectada para potenciar las capacidades de desarrollo y bienestar para que su integración familiar, escolar y social evolucione hasta el máximo de sus posibilidades.

De ahí que, para el movimiento asociativo de la discapacidad en general, y para FEAPS Madrid en particular, la Atención Temprana sea un objetivo principal de ocupación y preocupación en el que se ha venido trabajando a lo largo de muchos años hasta construir una red de 25 centros, que atienden anualmente a más de 2.000 niños y niñas de entre 0 y 6 años, trabajando bajo un mismo modelo de atención y con pautas comunes en la metodología de intervención.

Esta red, debido a la especificidad de los tratamientos requeridos, tiene unos costes anuales muy elevados, que sin el apoyo de la Administración Pública, no podrían ser asumidos en la mayoría de los casos por las familias que, por el sólo hecho de tener entre sus miembros a una persona con discapacidad intelectual, soportan un sobreesfuerzo económico que puede oscilar entre los 18.000 y 36.000 euros al año.

Pero en la situación actual, la Administración no puede, por sí sola atender la demanda existente. Una demanda, que como ha quedado dicho, no puede esperar a recibir un tratamiento sin que ello tenga consecuencias irreversibles en el futuro.

Por eso, como organización más representativa de la discapacidad intelectual, tenemos la obligación de seguir reivindicando la gratuidad y universalidad de esta Atención Temprana, pero también el compromiso, en esta coyuntura, de contribuir a paliar esta situación, buscando colaboradores que apuesten por el futuro de los niños y niñas con discapacidad intelectual.

En este sentido, la contribución de otras organizaciones como la Fundación Gmp, que ha decidido destinar la recaudación íntegra de su XIV edición del Torneo de Padel Solidario de Empresas a esta causa, es un gesto loable que merece todo nuestro reconocimiento y agradecimiento.

Con esta acción, estarán ayudando a familias con especiales necesidades económicas y que están a la espera de que sus hijos reciban un tratamiento; y sobre todo están dando un ejemplo de cómo la colaboración de todos: Administraciones Públicas, ONGS, fundaciones privadas y empresas, hace posible un mundo mejor.

Javier Luengo es el director gerente de FEAPS Madrid, organización que ha recibido los casi 50.000 euros recaudados por la Fundación GMP, en la XIV edición del Torneo de Pádel de esta institución, en la que han participado 36 empresas

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11/12/2013