La relación entre los niveles de ansiedad en las mujeres y su perjudicial efecto sobre el cerebro del feto fue mostrada en un nuevo estudio sobre los niños ambidiestros.
Recientemente los investigadores han descubierto que las mujeres que sufren de mucha ansiedad en la mitad de su embarazo son significativamente más propensas a tener un niño que sea ambidiestro, una condición relacionada con el autismo, la dislexia y la hiperactividad. Es la primera vez que los científicos han encontrado esta relación, y creen que pudiera ser necesario que se atienda el estrés de las madres a fin de reducir los efectos sobre el feto.

Los descubrimientos se basan en información recopilada en un proyecto auspiciado por la Universidad de Bristol, Inglaterra, el cual estudió las vidas de más de 7.400 madres y niños.

Los datos fueron analizados por la profesora Vivette Glover, del Imperial College, de Londres, quien examinó la proporción de niños ambidiestros. Esta condición a menudo es heredada, aunque también se piensa que puede ser consecuencia de los niveles hormonales en la matriz, particularmente de testosterona.

Los científicos establecen una distinción entre la gente ambidiestra, que puede usar ambas manos de manera totalmente independiente, y falsos ambidiestros, quienes tienen una mano preferida para cada tarea.

A las madres se les pidió que indicaran si, a la edad de tres años y medio, su niño usaba la mano derecha o la izquierda para seis tareas específicas como dibujar, lanzar una pelota, colorear, sostener un cepillo de dientes, usar un cuchillo y golpear cosas. Los niños que usaban sólo alguna de las manos para dos o más actividades fueron clasificados dentro del grupo de los falsos ambidiestros _algo que se encontró en 21% de los niños y 15% de las niñas.

Después de analizar otros factores, Glover encontró que un mayor nivel de ansiedad a las 18 semanas de embarazo se asociaba con un aumento de 20-30% de los falsos ambidiestros.

Glover señala en el estudio: "Dado que no se observaron efectos de la ansiedad posnatal, los resultados apoyan la hipótesis de que el efecto del estado de ánimo de la madre tiene lugar en la matriz. Los resultados respaldan la creciente evidencia que resalta la importancia de la programación fetal en humanos".

Un componente interesante del estudio, publicado en el boletín Early Human Development, es que la tendencia a ser derecho, zurdo o ambidiestro se veía afectada por la ansiedad sólo en la mitad del embarazo. No se observaron efectos significativos en madres que atravesaban estados de ansiedad en la semana 32 ni a las ocho semanas después del nacimiento del bebé. Si la madre estaba o no deprimida, ello no representaba ninguna diferencia: lo que contaba era la sensación de estar preocupada o estresada.

Los descubrimientos del estudio no significan que la gente ambidiestra desarrollará definitivamente problemas tales como autismo o dislexia, aunque estadísticamente tendrán más posibilidades de padecer alguna de estas enfermedades. "Debemos tranquilizar a las personas que son falsos ambidiestros, en el sentido de que probablemente no desarrollarán ninguno de estos problemas. Hablamos sólo sobre factores de riesgo, no certidumbres", indicó Glover.

eluniversal.com
16/12/2004