No solo las barreras arquitectónicas suponen un obstáculo para la vida de las personas que tienen algún tipo de discapacidad. La no atención adecuada a las necesidades de cada una de ellas puede acarrear, por ejemplo, una limitación en el proceso de aprendizaje. Un grupo de profesores de la Universidad de Málaga (UMA) se dieron cuenta de las dificultades a las que se enfrentaban algunos docentes en el desempeño de su tarea por no saber en todos los casos adaptar el modelo educativo a estos alumnos que suman unos 500 en los distintos centros.



La innovadora solución que plantearon fue crear una plataforma digital en la que unos y otros puedan intercambiar experiencias, exponer dudas y ofrecer respuestas a los problemas más cotidianos que puedan surgir en el día a día del discurrir universitario con respecto a la discapacidad. debemos equiparar sus condiciones a las del resto de alumnos



La impulsora y coordinadora de este proyecto, bautizado como Mejora de la enseñanza y la calidad de vida de los alumnos con discapacidad, es profesora de la facultad de Ciencias de la Comunicación y se llama María Eugenia González. "Me di cuenta en el curso de hace unos años en el que tenía varios alumnos con algún tipo de discapacidad y había momentos en los que se me planteaban muchas dudas sobre cómo atender sus necesidades en clase o facilitar unas condiciones de igualdad en los exámenes", explicó a este periódico.



El Servicio de Apoyo al Alumnado con Discapacidad de la UMA ofrece ayuda y asesoramiento a muchos de estos problemas, aunque no de forma generalizada porque solamente lo utilizan a día de hoy unos 90 alumnos. Esta profesora se empeñó en mejorar la atención educativa de sus alumnos y encontró a otros profesores con la misma inquietud a los que también se le planteaban los mismos problemas. La iniciativa de esta profesora le llevó a solicitar un proyecto de innovación educativa en 2010 que se le concedió y con el que nació la web que sirve de plataforma digital www.minusculasmayusculas.com para el intercambio de experiencias entre alumnos y profesores que persigue.



Sin la participación de unos y otros servirá de poco. González explicó que hace unas dos semanas fueron enviados por correo electrónico una serie de cuestionarios a los 30.000 alumnos, los alrededor de 2.400 profesores y a los 1.300 trabajadores de la UMA con los que se pretende recoger las impresiones del mayor número posible de ellos acerca de las necesidades que . Pero de momento, según dijo la coordinadora del proyecto, la respuesta no ha sido demasiado generalizada y apenas han respondido un centenar de profesores y otros tantos alumnos universitarios.



Por eso, animó a la participación porque "entre todos debemos hacer de la Universidad de Málaga un espacio más inclusivo". Especialmente se persigue la participación de los alumnos que sufren algún tipo de discapacidad porque "son el sujeto del proyecto", según la profesora, que dijo que "queremos saber dónde podemos mejorar para equiparar sus condiciones a las del resto de universitarios". Su voz será fundamental para desarrollar el documento final en el que se recopilen y expongan todas las propuestas de mejora que la UMA deberá llevar a cabo para garantizar en la medida de lo posible ningún tipo de desigualdad en la atención educativa que recibe todo el alumnado pueda o no andar, pueda o no ver, o pueda o no oír.



Para contagiar ese entusiasmo por el proyecto se ha elaborado un vídeo, alojado en la web y subtitulado para las personas con discapacidad auditiva, donde cinco alumnos y egresados de la universidad cuentan sus experiencias y opiniones, y animan también a realizar el sueño de cursar estudios universitarios.



No son tanto barreras física como las mentales las que aún quedan por derribar para mejorar la sensibilización y la atención a los que lo necesitan.

http://www.malagahoy.es
1/06/2013