Esta artista, que padece una discapacidad, es la secretaria de la Asociación de Enfermedades Neuromusculares
Kontxa Marona, natural de Palma del Río y vecina de la barriada cordobesa de los Angeles, fue artista plástica desde que un día cogió un lápiz por primera vez en el colegio. Entonces ya supo que su relación con el arte iba a ir más alla de ser una mera espectadora. Y eso a pesar de que a temprana edad se presentó en su vida la enfermedad de Charcot-Marie-Tooth, una dolencia cuyos síntomas principales son debilidad y degeneración muscular y también pérdida de sensibilidad en las extremidades del cuerpo. Pero padecer esta patología nunca fue un inconveniente para ella, sino "más bien para los que me rodeaban. Cuando trabajaba en la hostelería en Barcelona todos se fijaban en que no podía correr como los demás, no en si hacia bien o mal mi trabajo", opina esta pintora. Ella es la secretaria de la Asociación de Enfermedades Neuromusculares (Asenco), colectivo que trata de hacer más visibles estas patologías, para que dejen de ser raras y cuenten con mayor atención social, sanitaria y educativa.
Antes de quedarse embarazada de su única hija, Kontxa estuvo viviendo y trabajando en Barcelona, Gerona y también residió y se formó en el Reino Unido, donde estudió Arte Medieval en la Universidad de Cardiff y contaba con una beca para pintar. Allí fue donde la pintura explotó en su interior. Para ella el arte es su amigo, u equilibrio y u terapeuta. Ya en el colegio se sentía incomprendida, al ser disléxica. Sin saberlo, ha sido precursora de la arteterapia. "La arteterapia te ayuda a aceptar mejor la realidad y la enfermedad, aunque sea crónica y no se pueda curar", señala.
El lienzo le proporciona a esta cordobesa fuerza frente a los efectos de su enfermedad. Ha participado en diversas exposiciones y si hay algo que caracteriza su obra es la reutilización pictórica que ella hace de las ecografías y de esos felices momentos relacionados con la concepción de un ser vivo, incluyendo la correspondiente a su hija. Algunas de las muestras y jornadas de las que ha formado parte son Paralelismo , Entre fieras o Las chicas son guerreras . Sus obras incluso han viajado hasta México o Perú. Kontxa Marona se siente afortunada por contar con artistas y profesores que han creído en ella, como Sergio Cruz, "su maestro"; Miguel Angel Moreno Carretero, director de Scarpia; Sixto Rodríguez; Marta de Pablo; Nicolás de Maya; Alexis Amador; Fernando Sendra; Fernando Sánchez o Sergio Serabao. Como secretaria de Asenco, Marona ofrece conferencias en la Universidad de Huelva para maestros de educación especial y ha participado en talleres sobre arte y discapacidad. Pero ser artista contemporánea "no da para comer", expone Kontxa. "Mi hija y yo vivimos con 500 euros al mes, a los que hay que restar alquiler y demás gastos. Necesito operarme de un pie y no lo cubre la Seguridad Social y me gustaría poder comprarme un coche, pues mi silla de ruedas es manual", se lamenta esta artista
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27/03/2013