Tras un largo año de esfuerzos y alegría, en un momento donde la lectura quizá sea una salida a un verano para muchos, Minerva Sánchez, maestra experta en logopedia, ha sabido crear un lugar íntimo y a su vez lleno de vitalidad. Siempre rodeada por libros, papeles, lápices, colores, en su Taller de Animación de la Escritura y Lectura ofrece un abanico de actividades para niños y adolescentes con ciertas dificultades en el lenguaje y una salida a los padres que quieren incentivar a sus hijos en esta materia.
Minerva Sánchez se define como maestra: "En la actualidad, todo el mundo es profesor. Yo reivindico la palabra maestra porque parece que somos menos, incluso compañeras mías dicen que son profesoras, pero yo me considero maestra experta en logopedia". Las ideas claras de Minerva sobre su oficio provienen de pequeña: "Recuerdo de niña que mi hermana pequeña no podía decir madre y, por instinto, logré extraer esos sonidos de ella".
Desde el mes de octubre de 2011 dirige un Taller de Animación de la Escritura y Lectura. Fue su primer proyecto en solitario, ya antes había trabajado durante varias décadas como maestra de escuelas infantiles. Fue una apuesta sincera y atrevida que dio sus frutos al comenzar el curso con bastantes alumnos, desde los 3 a los 12 años, en un local de la Puerta de Carmona.
Hoy, trabaja con grupos pequeños, divididos en dos niveles, aquellos que saben leer y escribir y otros que ni leen ni escriben, a los que Minerva denomina "prelectores", es decir, no iniciados. En estos talleres fomenta el interés hacia el mundo de la lectura, pero sobre todo a través de valores y de iniciativas como crear su propio libro, incluso hacer su propio papel. "Hacerles soñar con el agujero de Alicia en el País de las Maravillas, los Baobas de El Principito, la Sonrisa de Daniela es crear magia con los niños", apunta Minerva al hablar de sus clases. Los alumnos se familiarizan con los personajes, los mundos imaginarios, ellos crean sus páginas en blanco a través de dibujos y, en cada trimestre, tratan un cuento y un valor por encima de otros: la valentía de Alicia, la responsabilidad del Principito, la importancia de la sonrisa, entre otros. No sólo se trata de contar cuentos sino de aprender a contar, a sentir, a inventar e imaginar. De esta forma, realizan numerosas actividades como escribir una obra de teatro, crear un libro en 3 dimensiones (pop-up), manualidades para crear papel y libros originales, etcétera.
El taller también tiene su propia proyección en internet a través del blog www.tallerdelecturaescritura.wordpress.com, donde trata la vinculación con los padres aparte de la apreciación de la evolución de los trabajos que hacen los propios alumnos en clase, donde ellos mismos pueden ver sus actividades. "Los comentarios en el blog resultaron motivadores para animarlos a imaginar y plasmar una historia", apunta la experta en logopedia.
No acaba aquí la actividad de Minerva. El año pasado, abrió su propio Gabinete de Evolución y Rehabilitación del Lenguaje en La Puebla del Río, que es su lugar de residencia aunque es sevillana de nacimiento. Es aquí donde desarrolla su trabajo más logopédico. "No sólo se trata de que los niños no puedan expresar la realidad; un niño que no comprenda bien, lógicamente, le acarrea muchos problemas". Dificultades en el aprendizaje, motivación para que los propios pequeños decidan aprender y qué pueden conseguir -pues la autoestima en estos niños es baja y hay que dinamizarla e impulsarla- son problemas a los que los niños deben enfrentarse diariamente.
"Todos aprendemos de forma diferente. Que un niño tenga dificultad en una cosa o en otra es normal, es el docente quien debe esforzarse en ver sus motivaciones a través de sus cualidades y tirar de ellas". La colaboración activa de los padres en casa hace que sus hijos estén más motivados, y que lo que hagan lo hagan lo mejor posible en ese momento. "Hay que valorar al niño, nunca decirle que escriba bien, ni lea bien, sino potenciar los valores de sus iniciativas personales", añade Minerva Sánchez.
A través de sesiones continuas e individuales con los niños es capaz de resolver muchos de los problemas que a veces creemos inabarcables o graves cuando no lo son. Por ejemplo, apunta la experta, "hay un momento de pánico en la familia cuando un menor de 3 años tartamudea; en este periodo hay que mantener la calma, pues lo más normal es que se deba a la propia evolución del lenguaje". En su blog estos temas se tratan con un tono divulgativo para que los padres y madres se relajen. Al prestarle tanta atención al tartamudeo, empeora la situación, mejor no intervenir pero siempre bajo unos fundamentos profesionales.
Otra dificultad difícil de diagnosticar a edades tempranas es la dislexia. En estos casos hay que ser muy cautos pues, a veces, existen factores externos, relativamente fáciles de solucionar que puedan estar originando los síntomas. "Normalmente, dicen que no son capaces de hacer algo, aún pudiéndolo hacer, y eso crea problemas inexistentes que pueden ocasionar otros más graves y aumentar su inseguridad".
En su otro blog, www.minervalogopediaescolar.wordpress.com, reflexiona sobre estos aspectos y ofrece visiones alternativas sobre educación y aprendizaje de la lectura y del habla, dirigido a los padres y madres de hijos con dificultades de este tipo. "Hay que darles no sólo una oportunidad sino todas las posibles a estos niños porque leer y hablar es indispensable para crecer bajo la propia voluntad".
http://www.diariodesevilla.es
21/09/2012