Según los datos obtenidos en un estudio que se publicará en la edición de Diciembre de la revista "Radiology", los niños que tardan mucho más de lo habitual en hablar, tienden a atender con el hemisferio derecho del cerebro más que con el izquierdo.
Este trabajo supone la primera vez que la resonancia magnética funcional se emplea para investigar la actividad cerebral asociada con el retraso en el habla. Los autores completaron estudios de resonancias magnéticas funcionales de niños retrasados en el habla con 35 niños de la misma edad sin dicha condición y compararon los patrones de activación cerebral entre los dos grupos.
Para estudiar la reacción del cerebro al lenguaje pasivo, los cerebros de los niños fueron retratados en imágenes a medida que oían cintas grabadas con la voz de sus madres. Los niños tenían unas edades de entre dos y ocho años.
Los hallazgos indicaron que aquellos niños con serios problemas de retraso en el lenguaje registraban niveles mayores de actividad en el lóbulo cerebral derecho que los niños que no tenían dichos problemas, que tienden a emplear el hemisferio izquierdo de su cerebro cuando escuchan.
Fuente:radiology.rsnajnls.org/
1/01/2004