Es una necesidad, no es un privilegio». Mónica Oviedo, vicepresidenta de Cocemfe Asturias (la Confederación de Personas con Discapacidad Física y Orgánica), llamó ayer a la responsabilidad de todos los conductores para dejar libres las plazas de aparcamiento destinadas a personas con movilidad reducida, dentro de una campaña de concienciación que se presentó ayer en los locales de la entidad.
La campaña, que cuenta con el patrocinio de la Consejería de Bienestar Social y la Agencia Asturiana para la Discapacidad, se desarrollará en toda Asturias, en forma de emplazamientos publicitarios en Oviedo, Gijón y Avilés. Entre las tres ciudades suman un total de 1.060 plazas específicas para personas con discapacidad, que necesitan de espacios especiales para poder moverse con autonomía.
Tal y como explicó Mónica Oviedo, se trata de defender un derecho, de «exigir a la ciudadanía que cumpla la ley, no sólo por el miedo a la posible sanción que puede acarrear el ocupar una plaza destinada a personas con movilidad reducida, sino también por dar a conocer los graves perjuicios que conllevan estos comportamientos anticívicos».
Además de la puesta en marcha de espacios televisivos, cuñas de radio y reparto de trípticos, los miembros de Cocemfe también saldrán a la calle y colocarán en los coches que ocupen plazas reservadas unas «multas» simbólicas, para disuadir a los conductores de usar estos espacios. La infracción real asciende a 200 euros de multa y la retirada del vehículo con la grúa municipal.
En la presentación de la campaña participaron los concejales de Tráfico y Seguridad Ciudadana de Oviedo, Gijón y Avilés, quienes garantizaron el apoyo y la involucración de las tres ciudades en esta iniciativa. La edil gijonesa Begoña Huergo indicó que próximamente se colocarán 218 postes de señalización en las plazas reservadas.
El director de la Agencia Asturiana para la Discapacidad, Luis Miguel Fernández Romero, avanzó, por su parte, que este año se cambiarán las tarjetas que identifican a los usuarios de vehículos con movilidad reducida, de manera que sean más difíciles de falsificar. Con ello, se busca acabar con la picaresca de quienes, de forma poco solidaria, se aprovechan de estas plazas especiales para dejar el coche en la ciudad
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12/03/2011