Una puntuación baja en la prueba de Apgar en el nacimiento se asocia en gran medida con parálisis cerebral en la infancia, según un estudio del Instituto de Salud Pública de Oslo en Noruega que se publica en la edición digital de la revista 'British Medical Journal'.
La puntuación de Apgar (en la imagen aplicado por su creadora, la doctora Virginia Apgar) es una forma rápida y simple de evaluar las condiciones de un bebé tras su nacimiento. El recién nacido es evaluado sobre cinco criterios simples (complexión, tasa de pulso, reacción ante la estimulación, tono muscular y respiración) en una escala del 0 al 2.
Los cinco valores se suman para obtener una puntuación que va del 0 al 10. Las puntuaciones de 3 o por debajo se consideran críticamente bajas, de 4 a 6 bajas y de 7 a 10, normales.
La parálisis cerebral es una enfermedad rara que afecta a entre dos y tres niños de cada 1.000 nacidos en los países occidentales. Estudios recientes han descubierto un fuerte vínculo entre una puntuación baja en la prueba de Apgar y la parálisis cerebral en niños nacidos a término o con un peso normal, mientras que los estudios en niños con un bajo peso al nacer o nacidos pretérmino muestran resultados contradictorios.
Los investigadores utilizaron datos del Registro de Nacimiento Médico de Noruega y el Registro Noruego de Parálisis Cerebral en Niños y evaluaron la asociación de la puntuación de Apgar en los 5 minutos siguientes al nacimiento con la parálisis cerebral en 543.064 niños nacidos entre 1986 y 1995.
Un total de 988 de los niños incluidos en el estudio fue diagnosticado con parálisis cerebral antes de cumplir los 5 años. La puntuación baja en la prueba se asoció de forma significativa con el posterior diagnóstico de parálisis cerebral. La prevalencia de parálisis cerebral en niños con la puntuación de Apgar de menos de 3 era más de 100 veces superior que en los niños con una puntuación de 10.
Según indican los investigadores, esta asociación fue superior en niños con un peso normal en el nacimiento y modesta en aquellos que nacieron con bajo peso. La puntuación baja en el Apgar también se asoció con todos los subgrupos de parálisis cerebral espástica pero fue más pronunciada para la cuadriplegia.
Los autores señalan que a pesar de la fuerte asociación entre la baja puntuación de la prueba de Apgar y la parálisis cerebral, es alentador que casi el 90 por ciento de los niños con una puntuación menor de 4 al nacer no desarrolló parálisis cerebral.
Dado que la puntuación de Apgar es una medida de la vitalidad poco después del nacimiento, los descubrimientos sugieren que las causas de la parálisis cerebral están vinculadas estrechamente con factores que reducen la vitalidad infantil. De hecho, una puntuación baja en la prueba podría interpretarse como un indicador de deterioro cerebral que se habría producido durante el embarazo o parto
http://www.europapress.es
1/11/2010