Vivimos más años y esto ha repercutido en una mayor incidencia de Alzheimer, una enfermedad neurológica degenerativa. Perder poco a poco la memoria repercute en la calidad de vida de las personas que lo padecen y, también, en la de sus familias. Se van perdiendo habilidades y, por tanto, autonomía. Hoy por hoy, el Alzheimer no tiene cura, pero con las terapias adecuadas se puede retrasar la pérdida de esas habilidades.
Desde 2006 Afama, Associació de Familiars i Amics de Malalts d'Alzheimer de Pollença, ofrece a sus usuarios un servicio de centro de día en el que se realizan diversas actividades de estimulación cognitiva. Este proyecto cuenta con el apoyo de la Obra Social de a Nostra. Maria Morro, trabajadora social de Afama, explica que en las actividades de estimulación cognitiva se trabajan diferentes aspectos como la memoria, la orientación, el lenguaje y el cálculo, en diferentes sesiones semanales.
De forma diaria, se realizan actividades de la vida cotidiana como peinarse, abrocharse la ropa o lavarse las manos; además de otros ejercicios de psicomotricidad. "Está demostrado que la estimulación cognitiva junto con el tratamiento farmacológico ayudan a retrasar el deterioro cognitivo. Les ayuda a preservar durante más tiempo sus capacidades y que, por tanto, sean más independientes", argumenta Maria Morro.
Por las instalaciones de Afama Pollença pasan cada día unos 12 usuarios que acuden en horarios diferentes dependiendo de su necesidades y de las de sus familiares. Maria Morro destaca la importancia de la detección precoz y el inicio temprano de los tratamientos: "Cuanto antes se empiece, mejor tanto para el retraso del deterioro como para la adaptación de la persona a un nuevo entorno, fuera de su núcleo familiar". Asimismo Maria Morro destaca que otra de las cuestiones a las que se concede importancia es al mantenimiento de las relaciones sociales. "Muchos de los ejercicios son individuales, pero se realizan en grupo para propiciar el contacto con otras personas".
Con el trabajo continuado la persona con Alzheimer puede recuperar aquellas habilidades que ha ido perdiendo por falta de práctica. Sin embargo, es imposible volver a tener capacidades que se han perdido por el avance del Alzheimer. Maria Morro señala que hay un programa de estimulación cognitiva adaptado a cada fase de la enfermedad.
Hasta el final se continúa con la fisioterapia, la psicomotricidad y las actividades de la vida diaria. "Si un ejercicio no se puede hacer por escrito se hace oral o a través de imágenes y dibujos. Hay recursos hasta bien avanzada la enfermedad para continuar con la estimulación".
Los inicios de Afama
AFAMA Pollença se creó en 1997 como resultado de la iniciativa de una grupo de familias de la localidad que querían dar respuestas a las necesidades e inquietudes de los afectados por esta enfermedad. En 2006 esta la asociación sin ánimo de lucro abrió su primer centro de día que atendía a los usuarios de 9 a 13. Desde el año pasado el servicio está en marcha de las 8 a las 18 y los sábados de 10 a 18. También ofrece información y apoyo a los familiares y los cuidadores del enfermos de Alzheimer
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31/10/2010