La sala ‘Roxy B’, ubicada en el madrileño barrio de Chamberí, se convertirá, a partir del próximo mes de diciembre, en el primer cine accesible para ciegos y sordos. Toda una apuesta para que el colectivo disfrute plenamente de su tiempo de ocio.

Aprovechando la simbólica fecha del 3 de diciembre, Día Mundial de las Personas con Discapacidad, la sala ‘Roxy B’ se reestrenará, acogiendo entre su público a cinéfilos que, hasta ahora, encontraban serias dificultades para poder disfrutar de una buena película.

El cine dispondrá de un sistema de audiodescripción para los ciegos (gracias al cual una voz en off les irá explicando qué es lo que sucede en la pantalla); subtitulado especial para personas sordas (incluirá narración de sonidos, música y matices de las conversaciones); bucle magnético, para que la banda sonora llegue sin distorsiones a los audífonos e implantes cocleares; programas en braille y de fácil lectura para personas con discapacidad intelectual; lengua de signos para presentaciones y mesas redondas y, claro, ausencia de barreras físicas, para facilitar la movilidad.

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12/12/2009