Una serie de jóvenes con síndrome de Down han estado haciendo prácticas en diferentes servicios de la Universidade de Santiago. El próximo viernes finalizarán su labor Raquel Mato y José Manuel Lence, que han venido trabajando como auxiliares de consejería en la Casa Elisa Jimena Fernández de la Vega y en el rectorado, respectivamente. Completarán de esta manera su formación en el curso Operario de Tareas de limpieza y apoyo al personal.

Antes de Raquel y José Manuel, otros tres jóvenes de la fundación Down Compostela, Elías Ledo, Jesus Rey y Adrián Cutrín realizaron también prácticas en la Universidade de Santiago durante dos semanas, tras realizar asimismo el curso de operario de tareas de limpieza y apoyo al personal. Esta actividad la programó la fundación Down con la financiación de Fundosa Social Consulting.

Las prácticas han estado propiciadas por un convenio firmado en su día por la USC y la Federación Down Galicia. El objetivo de la Universidade con esta iniciativa es «dar un paso más dentro das súas propostas e accións de responsabilidade social e de cara a favorecer a inclusión e a normalización de diferentes colectivos y dar visibilidade ás persoas con síndrome de Down, según explicó el gerente de la Universidade, Pedro García Moreno en el acto inaugural de las prácticas de los cinco jóvenes.

Para estos, la actividad desarrollada ha supuesto «la oportunidad de demostrar todo lo que son capaces, ya que la formación de que disponen les permite desarrollar con éxito las tareas encomendadas», refirió el presidente de la fundación Down Compostela, Juan Martínez.

La preparadora laboral de la entidad, Blanca Taboada, resaltó la «plena integración que han demostrado tanto los cinco jóvenes como el personal de la Universidade, con unos resultados que creemos satisfactorios».

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12/11/2009