La Unidad de Salud Mental Infanto-Juvenil (USMI) del Hospital Universitario Reina Sofía atendió en 2008 a 235 niños con sospechas de sufrir un Trastorno de Déficit de Atención por Hiperactividad (TDH), 61 más que los registradas en 2007.

El responsable de la USMIJ, Vicente Sánchez, ha indicado a Efe que ha aumentado el número de niños que llegan a las consultas de esta unidad derivados de otros servicios de pediatría bajo la sospecha de sufrir TDH, pero no el número de diagnósticos confirmados.

Así, en 2008 se les diagnosticó hiperactividad a 68 niños, lo que supone un 28,9 por ciento de las sospechas, mientras que en 2007 fueron 56 los casos de hiperactividad, es decir un 32,18 por ciento.

Sánchez ha afirmado que, a veces, esto se debe a que "está de moda" y a que no se realizan todas las pruebas necesarias, ni son profesionales especializados en hiperactividad los que estudian la situación de algunos niños.

Ha explicado que el diagnóstico fundamental suele ser un déficit de atención por falta de concentración pero que no tiene por qué ser hiperactividad. Estos trastornos pueden venir derivados por otros motivos como ansiedad, dislexia o depresión, por lo que es "muy importante" realizar un diagnóstico específico en cada caso.

Por otro lado, el doctor ha hecho hincapié en que, una vez confirmado que el niño es hiperactivo, es "fundamental" llevar a cabo un tratamiento combinado, es decir, apoyar el tratamiento farmacológico con un tratamiento psicológico y psicoeducativo.

"Es necesario que tanto los padres como los profesores controlen la situación", por eso "hay que formarlos en esta materia a través de las unidades y profesionales de salud mental", ha señalado Sánchez.

Por su parte, la presidenta de la Asociación Cordobesa de Déficit de Atención e Hiperactividad (ACODAH), Francisca Valenzuela, ha afirmado que en Córdoba hay alrededor de 3.000 niños que sufren un TDH.

De ellos, el 80 por ciento de los casos tiene un origen genético, mientras que el 20 por ciento restante se achaca a familias desestructuradas o al sufrimiento fetal, ha precisado.

"Son niños que cuando le hablas, parece que no te escuchan, que se mueven continuamente y que no se suelen parar ni prestar atención a no ser que haya algo que les motive mucho. En el colegio suelen llamar la atención e intentan ser líderes para no sentirse rechazados", ha asegurado Valenzuela, madre de un niño con hiperactividad.

Ha afirmado que en el colegio se intenta que se integren con el resto de los compañeros pero "suelen ser rechazados porque son muy cansinos", lo que suele acarrearles "trastornos de conducta y ansiedad".

Ante esto, ACODAH ha reivindicado que haya "más profesionales" para poder tratar a los niños, así como el abaratamiento del tratamiento que con receta médica asciende a unos 40 euros a los que hay que sumarle el dinero destinado a terapias, actividades extraescolares, clases particulares y actividades deportivas que son "imprescindibles" para estos niños.

El presidente de la Federación Andaluza por TDH, José Luis Fernández, ha añadido además que en Andalucía hay más de 24.000 niños con este trastorno, sin contar los que no están diagnosticados.

Fernández ha señalado asimismo que en la región hay una prevalencia del 4 al 7 por ciento de niños en edad escolar que son hiperactivos, por lo que ha pedido a las consejerías de Salud y Educación que establezcan "un protocolo único como hay otras comunidades de España".

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30/05/2009