Un examen nacional dirigido mejorar el sistema educativo peruano ha creado una enorme crisis educativa en Perú, pues sólo el 1% de los profesores lo aprobó y hay escasez de profesores "capacitados".
Ante la perspectiva de quedarse con miles de aulas vacías, el ministerio de educación optó por mantener en sus puestos a los miles de docentes que suspendieron.
Este examen, era el último de una serie de intentos fallidos dirigidos mejorar el nivel del sistema educativo en Perú.
De un total de 180.000 profesores de escuelas públicas sólo aprobó el 1%, mientras que más del 95% suspendieron.
Pero para mantener el orden en las aulas, el ministro de educación, José Chang, decidió mantener a los profesores suspendidos en sus puestos.
Chang defendió la dura política para mejorar el sistema educativo del país, que actualmente se sitúa en último lugar en Latinoamérica, incluso detrás de muchos países asiáticos.
Condiciones difíciles
Gran parte del profesorado forma parte de sindicatos de izquierda que en los últimos tiempos trataron de boicotear la realización de estos exámenes y convocaron huelgas cuando sus empleos se vieron amenazados.
Muchos de estos docentes están mal pagados y a menudo enseñan a niños desnutridos de áreas pobres y marginadas del país.
A pesar de esto, desde el ministerio de Educación no se ha mencionado ninguna medida para solucionar el problema desde su base.
El gobierno de Perú es consciente del bajo nivel educativo existente y de cómo esto supone un importante freno en el desarrollo del país.
Sin embargo, su política actual se limita a exponer las limitaciones del profesorado sin ofrecer una solución realista a la crisis educativa.
BBC
19/03/2008