La otorrino del Hospital Casa de Salud de Valencia, Amparo Platero, aseguró el lunes que la sordera o hipoacusia es la enfermedad congénita más frecuente en el recién nacido. No obstante, destacó que «hoy en día casi la totalidad de la población infantil que la padece tiene solución» , según informaron fuentes de este centro médico en un comunicado.
Platero explicó que los implantes cocleares permiten recuperar la audición «de manera total en la mayoría de los casos» . Sin embargo, hay que cumplir unos determinados requisitos para realizar estos implantes. En cuanto a la población infantil, entran todos «pero se recomienda que no hayan estado muchos años sin oír» .
En este sentido, aseguró que en el momento en que a alguien se le priva un tiempo de la audición se pierde la plasticidad cerebral para adquirir el lenguaje. En cuanto a los adultos apuntó que es más complicado porque alguien que ha estado toda la vida sin poder oír, «aunque se le practique el implante y pueda hacerlo no podrá descifrar el lenguaje». Los seis años marcan el límite Según la doctora, los seis años marca el límite de cómo va a ser el desarrollo. Un niño sordo total «debería operarse antes de esta edad» . Si ha nacido sordo y no se realiza el implante antes de los seis años la evolución «deja de ser favorable» por lo que la doctora puso de relieve «la importancia» de la detección precoz de la sordera en los niños.
Asimismo, explicó que la hipoacusia puede ser breve cuando la pérdida de cantidad de audición es pequeña y puede llegar a ser hasta aguda o severa, que es la sordera total. Puede ponerse de manifiesto de recién nacido «o con muchísima frecuencia lo notamos durante la infancia» . En este sentido recordó que el Hospital «sí realiza esta prueba a todos los niños que llegan al mundo». A este respecto, Platero indicó que «lo más importante» es la detección precoz. Este es, según ella, el objetivo de cualquier especialista, ya que en función de cómo el niño oiga va a desarrollar el lenguaje y éste tiene unas etapas críticas para su desarrollo. Entonces, si se intenta que no sobrepasen esas edades críticas «se puede conseguir que el niño tenga un correcto desarrollo del lenguaje». En cuanto a las causas, afirmó que son numerosas. Si el bebé tiene familiares con hipoacusia «se recomienda llevar al niño al otorrino» . Otra de las causas es la otitis de repetición y la meningitis.
Levante
12/12/2007