Una tercera parte de las personas con discapacidad que son atendidas en el Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) son menores de 18 años, lo que constituye un problema de salud pública que prácticamente carece de opciones de tratamiento clínico en el país, informó Luis Guillermo Ibarra, director del nosocomio.
Ayer se inauguró la primera unidad de hospitalización para rehabilitación infantil, en la que ya se atiende a los niños con diversas discapacidades o lesiones congénitas, como problemas de deglución y control de esfínteres, y también deficiencias secundarias a otros padecimientos y cirugías.
Ibarra comentó que estos pacientes pueden llegar a tener una estancia promedio de un mes, tiempo durante el cual logran una mejor recuperación. Señaló que resultado de lesiones craneoencefálicas, los infantes también están expuestos a sufrir afectación en sus funciones motoras, problemas de lenguaje y/o de aprendizaje, que en la nueva unidad pueden revertir.
También ayer, antes de la inauguración de las nuevas instalaciones, el INR suscribió un convenio de colaboración con los institutos nacionales de Perinatología y Pediatría y el Hospital Infantil de México, los cuales enviarán al INR a los niños que requieran de esta atención especializada.
Durante el acto el secretario de Salud, José Angel Córdova Villalobos, resaltó la importancia de avanzar en la integración de redes de servicio de este tipo, con las cuales se ofrece una atención médica centrada en el paciente, integral, oportuna y continua.
Ante los directores de los institutos y hospitales, el funcionario planteó que este convenio forma parte de una serie de acciones que se requieren para mejorar las condiciones de salud de la población, en particular, de la infantil. Se debe fortalecer la atención clínica preventiva desde el embarazo, la atención del parto y del recién nacido para evitar los riesgos de discapacidad.
Refirió, entonces, los avances del Seguro Médico para una Nueva Generación, que a la fecha ha afiliado a más de 625 mil niños nacidos después del primero de diciembre de 2006, quienes están protegidos de los principales padecimientos que ocurren durante los primeros cinco años de vida, pero sobre todo, agregó, en el primer mes, cuando se presentan alrededor de 40 por ciento de las muertes de los recién nacidos.
La Jornada México
29/10/2007