La mayor parte de la población ve las playas, y sobretodo en esta época estival, como un lugar de esparcimiento y diversión. Sin embargo, las personas con discapacidades psíquicas o físicas, tienen muchas dificultades para poder darse un baño.
Con esta visión, varios ayuntamientos, junto con la empresa «educanova», montan en las playas «áreas de esparcimiento», una para discapacitados físicos y otra para discapacitados psíquicos.
Es el caso de la playa alicantina de El Postiguet, donde en la zona del Cocó, están ubicadas dos de estas carpas: la de discapacitados físicos en primera línea de playa, y la de los menores con discapacidad psíquica unos metros más atrás.
Concretamente, la zona de discapacitados psíquicos -dedicada entre 12 a 20 años- se coloca en las playas de El Postiguet, San Juan, Urbanoba, Santa Pola, El Pilar de la Horadada, El Postiguet, El Campello, Villajoyosa y Denia.
Niños dependientes
Allí, los talleres duran una semana, en la que los padres pueden descansar del trabajo agotador de cuidar a sus hijos por un rato, y disfrutar también de sus vacaciones.
Realizan talleres relacionados con la psicomotricidad, los voluntarios les bañan y hacen juegos en el mar, comen todos juntos e incluso, los más veteranos -los que han repetido varias semanas a lo largo del verano-, se atreven a ayudar a los recién llegados. El único requisito para participar es que los padres rellenen un formulario para que los voluntarios conozcan las características de cada uno. En El Postiguet, estas actividades se realizarán hasta el 31 de agosto, aunque en otras playas durará hasta mediados de septiembre.
Y en primera línea de playa, una gran sombra alberga la zona de discapacitados físicos, donde otros voluntarios ayudan a éstos a bañarse, y los acompañan en sillas de ruedas acuáticas. Además, dentro del mar también tienen sillas fijas bajo otra gran sombra.
ABC
8/08/2007